Conservar adecuadamente los embutidos y otros productos como quesos o fiambres es una preocupación común en muchos hogares. Estos alimentos, aunque parecen duraderos, son en realidad bastante delicados y si no se almacenan correctamente, pueden estropearse rápidamente, lo que supone una pérdida de alimentos y dinero.
Afortunadamente, Lidl ha lanzado un producto diseñado específicamente para prolongar la vida útil de estos alimentos, brindando una solución práctica y accesible para mantener los embutidos frescos por más tiempo.
El producto de Lidl: la clave para conservar mejor el embutido
Lidl, la cadena de supermercados conocida por ofrecer productos innovadores a precios competitivos, ha presentado un set de recipientes diseñados específicamente para la conservación de embutidos, quesos y fiambres. Este set está compuesto por cuatro táper que destacan por su facilidad de uso, su capacidad para prolongar la frescura de los alimentos y su precio accesible de solo 4,99 euros por pack. Estos recipientes son ligeros, duraderos y apilables, lo que facilita su almacenamiento sin ocupar mucho espacio en la nevera.
Una de las características más atractivas de estos tápers es que se pueden abrir y cerrar fácilmente, lo que los hace ideales para el uso diario. A diferencia de las envasadoras al vacío, que requieren más tiempo y esfuerzo, estos recipientes son una opción rápida para quienes buscan una solución práctica sin complicaciones. Además, se pueden lavar en el lavavajillas sin ningún problema, lo que garantiza su higiene sin esfuerzo adicional. También se desmontan fácilmente, lo que permite no solo una limpieza más profunda, sino también utilizarlos como bandejas para presentar embutidos y quesos en reuniones o aperitivos en casa.
¿Dónde es mejor conservar el embutido: en la nevera o fuera?
Una de las dudas más comunes al comprar embutidos es dónde almacenarlos para que conserven su frescura y sabor. Aunque algunos embutidos, como los jamones curados, pueden mantenerse a temperatura ambiente, la mayoría de los embutidos y fiambres deben conservarse en la nevera para evitar que se estropeen rápidamente. Los cambios de temperatura y la exposición al aire pueden acelerar el deterioro de estos productos, lo que provoca que pierdan su sabor, textura y, en algunos casos, puedan ser peligrosos para la salud.
La recomendación general es mantener los embutidos en la parte menos fría de la nevera, generalmente en los compartimentos para carnes y fiambres, donde la temperatura es constante y moderada. Los recipientes como los que ofrece Lidl son ideales para este tipo de almacenamiento, ya que cierran herméticamente, evitando que el aire entre en contacto con los productos y ralentizando el proceso de oxidación y pérdida de humedad. Este tipo de almacenamiento garantiza que los embutidos conserven su frescura y sabor durante más tiempo.
¿Cuánto tiempo dura el embutido sin ponerse malo?
La duración de los embutidos varía en función del tipo de producto y su método de conservación. Por ejemplo, los embutidos curados, como el salchichón o el chorizo, pueden durar varias semanas o incluso meses si se almacenan adecuadamente. En cambio, los fiambres como el jamón cocido o la mortadela, que son más frescos, suelen tener una vida útil más corta, de aproximadamente una semana o diez días, siempre y cuando se mantengan refrigerados.
Una vez abierto el envase original, la duración de los embutidos se reduce considerablemente, ya que entran en contacto con el aire y las bacterias. Es en este punto donde el uso de recipientes como los de Lidl se vuelve esencial. Al guardar los embutidos en un táper hermético, se reduce la exposición al aire y se ralentiza el crecimiento bacteriano, prolongando su vida útil y evitando que se sequen o se estropeen. Además, es fundamental asegurarse de que los embutidos se consuman antes de la fecha de caducidad indicada por el fabricante y evitar almacenarlos a temperaturas superiores a los 5ºC.
Otros trucos para conservar el embutido en buen estado por más tiempo
Además de utilizar recipientes herméticos como los de Lidl y almacenarlos en la nevera, existen otros trucos que pueden ayudar a mantener los embutidos frescos durante más tiempo. Aquí te presentamos algunos consejos útiles para conservar estos productos de manera óptima:
- Cortar solo lo necesario: Es recomendable cortar únicamente la cantidad de embutido que se va a consumir en el momento. Esto evita que el producto se exponga innecesariamente al aire y se seque rápidamente. Los embutidos enteros, como una pieza de chorizo o salchichón, duran más que aquellos que ya están cortados en lonchas.
- Envolver adecuadamente: Si no se cuenta con recipientes especiales, una alternativa es envolver los embutidos en papel film antes de guardarlos en la nevera. Sin embargo, el uso de recipientes herméticos es siempre más efectivo, ya que evita que los olores de otros alimentos se transfieran a los embutidos.
- Mantener la humedad adecuada: Para evitar que los embutidos se sequen, es importante mantener un cierto grado de humedad dentro del recipiente. Esto puede lograrse colocando un trozo de papel de cocina ligeramente humedecido junto a los embutidos. Este truco es especialmente útil para los embutidos curados, que tienden a perder su humedad con el tiempo.
- Congelar embutidos: Si se ha comprado una cantidad considerable de embutidos y no se van a consumir en un corto plazo, congelarlos es una opción válida. Los embutidos curados, en particular, se congelan bien y pueden durar hasta seis meses en el congelador sin perder su sabor ni textura. Lo ideal es congelarlos en porciones pequeñas, utilizando papel film o los tápers de Lidl, para que sea más fácil descongelar solo lo necesario.