Sin incidencias a destacar y antes de lo previsto. La Diputación Foral ha culminado esta semana el tendido del segundo puente que permitirá el tránsito por la ampliación de la Supersur por encima de la zona de Bolintxu, en las faldas bilbainas del Pagasarri.
Fuentes del departamento foral de Infraestructuras y Desarrollo Territorial han informado este viernes de que la compleja maniobra de abatimiento que se ha llevado a lo largo de dos días tuvo lugar “sin contratiempos”.
Como ocurrió en abril pasado, cuando se efectuó el tendido del viaducto paralelo, la maniobra ha consistido en el abatimiento y cierre de los semiarcos que conforman el arco que sustenta el eje en sentido Cantabria. Este arco, con una longitud de algo más de 165 metros, sobrevuela en más de 40 metros el arroyo del Bolintxu, salvando la vegetación y la fauna que permanecen intactos bajo el mismo.
Primero se efectuó el desacople de los semiarcos con las torres auxiliares que han servido para construirlos en vertical usando cuatro grandes gatos hidráulicos apoyados en el frente de los dos estribos. Una vez sueltos, dos grandes maromas formados por 66 cables de acero cada una y aguantadas por otros cuatro gatos de 1500 toneladas fueron depositando poco a poco ambos semiarcos. Como en la maniobra realizada en abril con el primer arco se controló constantemente todo el proceso para evitar desviaciones sobre el recorrido teórico y su estado tensional. La maniobra de aproximación y el encaje final entre las dos estructuras fue el último paso.
Apoyados en las cámaras colocadas en la punta de uno de los semiarcos y en las imágenes en directo de drones, se procedió a juntar las dos estructuras, maniobra que culminó con el traslado de varios técnicos que comprobaron in situ que todo estaba según lo previsto. La semana que viene se procederá a cerrar la clave y el arco comenzará a funcionar por sí mismo sin los cables que lo han sostenido en el proceso de abatimiento.
Inauguración en primavera
Estos trabajos forman parte de las obras de la fase 1b de la Variante Sur Metropolitana y con la estructura que conectará los túneles de Arnotegi y Seberetxe se culmina una de las fases más críticas de todo el proyecto que se inició en 2019.
Con los planes cumpliéndose, incluso con algo de adelanto ya que la segunda maniobra de abatimiento se esperaba ejecutar en agosto, el departamento que dirige Imanol Pradales mantiene que la inauguración del nuevo tramo de autopista, entre la zona de El Peñascal y su conexión con la AP-68 a la altura de Arrigorriaga, pueda efectuarse en la primavera próxima.