Antonio Resines y Jorge Sanz acudían este miércoles a ‘El Hormiguero’ para promocionar su nuevo proyecto, ‘Serrines, madera de actor’, una propuesta cómica en la que ambos encabezan el elenco y que ya está disponible en ‘Prime Video’.
Los dos actores se conocieron en los 80 y desde entonces han forjado una gran amistad en la que predomina el afecto, pero sobre todo el sentido del humor, y las bromas son una constante que nunca puede faltar entre ambos. Tanto, que pueden darse en cualquier tipo de momento, también en los más difíciles, tal y como ambos desvelaron anoche en el espacio de Trancas y Barrancas, donde contaron la insólita situación que vivieron en el hospital cuando Jorge Sanz estuvo ingresado en UCI.
LA SURREALISTA BROMA DE JORGE SANZ A RESINES ¡EN LA UCI!
Hace unos años, Jorge Sanz sufrió un infarto que lo mantuvo ingresado en el hospital durante un tiempo, aunque tras una semana “aburrídisimo en la UCI”, recibió una visita que le hizo pasarlo en grande, la de Ángel Planas, que llegó a ver a su amigo y le planteó que sería una buena idea gastar bromas a algunos amigos por teléfono, una ocurrencia que al actor le pareció buenísima en ese momento.
Antonio Resines fue su primera ‘víctima’, tal y como él mismo contó durante su paso por ‘El Hormiguero’.
"Llamo a Antonio y me coge a la primera, cosa rarísima por cierto. Me dice 'Jorge, Jorgito ¿qué tal estás?'", comenzaba relatando el intérprete, “muy-bien-Antonio. Ya-me-han-dicho-que-mañana-me-suben-a-planta”, contaba que le había respondido a su amigo imitando la voz lentísima que utilizó para gastarle la broma.
Una broma que su amigo se creyó totalmente y tras un momento de silencio, Resines reaccionó asegurando: "Jorgito, tranquilo, ahora lo importante es que descanses mucho, duerme todo lo que puedas. Yo me voy a encargar personalmente de que no vaya nadie a verte", revelaba Sanz, que le había respondido el protagonista de ‘La caja 507’, ante lo que este matizaba: "Me lo creí, no es que sea buen actor, es que hace ese tipo de cosas", aseguraba.
Además, Antonio Resines no fue la única víctima de la surrealista broma de Jorge Sanz que momentos después volvía a la carga y le gastaba la misma broma a otro de los que fuera uno de sus grandes amigos, Enrique San Francisco.