El frontón Navarra Arena de Iruñea en el horizonte. El Leviatán, el monstruo mítico, el que temían los navegantes que tomaban el océano en el pretérito terraplanista del ser humano. Los confines estaban dominados por una bestia horrenda o, directamente, por el abismo más infinito.
Joseba Ezkurdia-Beñat Rezusta y Iñaki Artola-Jon Mariezkurrena se asomarán este domingo a la final del Campeonato de Parejas como el escenario de una batalla que, a tenor de los precedentes, se antoja como igualada. La inmensidad. Hay dos versiones en la moneda de la victoria. “No sería descabellado decir que se trata de un enfrentamiento entre el trabajo y el brillo”, disecciona Jon Apezetxea, técnico de Aspe, empresa que rige el destino de los colorados. Aimar Olaizola, responsable deportivo de Baiko Pilota, esgrime que se trata de una final “muy igualada”. La teoría del equilibrio entre dos goizuetarras en la sala de máquinas.
22-15 y 22-18 en el retrovisor. Ambos resultados favorecieron a los veteranos. Jugaron en el Astelena y el Labrit. Con un frontón distinto, el momento de juego alterado y los intangibles de una txapela en la yema de los dedos, todo cambia. “Hay que jugar todos los partidos. Es otro material y otro recinto. Todo influye. Lo que hemos hecho antes no sirve para nada”, reflexiona Apezetxea, quien admite que “el Navarra Arena beneficia a los pegadores y está claro que tenemos que intentar evitar la derecha rompedora de Jon Mariezkurrena; sin embargo, también es cierto que Joseba y Beñat son pelotaris que imponen mucho ritmo y eso es muy incómodo. Jugando así, será complicado que los pupilos de Baiko estén continuamente dando pelotazos de brillo”.
El momento de juego
Respecto al momento de juego de Ezkurdia y Rezusta, el intendente afirma que “no” tienen que centrarse en el patrón de juego de anteriores choques, sino en “hacer lo suyo”, como “han hecho durante todo el Parejas” y “complementarse bien en la cancha”. Es decir, ser honestos consigo mismos. Mirarse al espejo. Ideas claras. Esa hoja de ruta les ha catapultado desde la primera jornada hasta la pelea por el título. En total: trece victorias en 17 partidos. No es mal bagaje. Y eso que muchos apenas les tenían en cuenta cuando se presentó el Parejas. “Llevan haciendo el mismo plan de trabajo los últimos diez o doce años. Hay veces que las cosas no salen. Se ha visto que los frutos se recogen a base de trabajo. Son dos pelotaris cabezones en el buen sentido de la palabra”, añade el entrador navarro.
“Además, tienen experiencia de sobra en este tipo de partidos –Joseba ha jugado seis finales de Primera y ha ganado cinco y Beñat ha disputado cinco y se ha llevado dos–. Siempre existen las mariposas en el estómago en las jornadas previas, pero no creo que les afecte demasiado todo el ruido externo”, analiza Apezetxea.

Joseba Ezkurdia y Beñat Rezusta, finalistas del Parejas tras derrotar a Laso-Iztueta en el Atano III de Donostia.
“Es verdad que Mariezkurrena ha demostrado un gran brillo, pero Artola también ha hecho muchos méritos. Los nuestros han demostrado una gran capacidad de trabajo”, remacha el técnico.
"Llegan los mejores"
Olaizola II, por su lado, observa que “han llegado a la cita cumbre las dos parejas que mejor han jugado”. “Ezkurdia y Rezusta son una dura piedra de toque para Artola-Mariezkurrena II. Los de Aspe han demostrado que están con mucha confianza y suman mucho”, sostiene el tres veces campeón de la modalidad, quien evoca que “han jugado partidos duros, que se han desnivelado por detalles. Espero que los de este domingo caigan de nuestro lado”.
El peso del partido
Visto lo visto, el peso del partido puede caer sobre los zagueros. Cabe recordar que el último campeón en el Navarra Arena fue José Javier Zabaleta –el pegador más rutilante del cuadro– en 2023 y 2024 y el propio Mariezkurrena II ha triunfado en dos ocasiones en el Masters en el mismo escenario.
“Tanto Jon como Rezusta están jugando a un nivel altísimo. Está claro que uno no llega a este tipo de citas si no ha estado en un buen momento de juego. Ambos le están dando mucho a la pelota. Diría que Beñat está haciendo su mejor Parejas de las últimas tres o cuatro campañas. Parece imposible que falle una sola pelota. Esa faceta es esencial, porque son dos pelotaris muy fuertes”, explica Aimar.
Aun así, el bisturí en los cuadros alegres se antoja clave. “El dominio no gana los partidos. Es importante ver cómo entran al remate tanto Joseba como Iñaki. Ezkurdia tiene más experiencia, pero Artola está con confianza. Le veo suelto y espero que dé lo suyo”. Sí que es cierto que en las dos primeras comparecencias de la liguilla de semifinales al puntillero de Alegia le costó afilar el remate, pero en la tercera expuso razones de sobra. “Iñaki muchas veces domina el tanto, pero luego hay que terminarlo, porque corres el peligro de alargar el partido. Ante Peña II-Albisu (22-10) le vi más agresivo. Ha sido su mejor partido de los tres, sin duda. Tiene que tener claro que, si quiere ganar, tendrá que rematar”, recita Olaizola II.