Alavés B 2 -0 Racing Rioja
ALAVÉS B Adrián Rodríguez; Doumbia (Romera, m. 78), Ander Sánchez (Julio m. 84), Imanol Baz, Keller; Mariano (Adrián Pérez, m. 84), Selu Diallo, Eneko Ortiz, Guti (Maroan, m. 68); Otu, Marc Tenas.
RACING RIOJA Cheng; Manso, Álvaro Cordero (Diego Hernández, m. 56), Mensah, Julen Gutiérrez; Barrenechea (Maiso, m. 72), Álvaro García; Fran Álvarez, Coelho (Cerrajería, m. 46), Jin (Lapeña, m. 46); De la Fuente.
Goles 1-0 (m. 82): Maroan. 2-0 (m. 90): Romera.
Árbitro Baigés Donés (colegio aragonés). Tarjetas amarillas a Ander Sánchez, Maroan, Manso, Álvaro Cordero, Cerrajería y Álvaro García.
Estadio Instalaciones de Ibaia, ante unos 400 espectadores.
El filial alavesista se impuso al Racing Rioja con dos goles en la recta final. Los de José Manuel Aira salieron atenazados pero mejoraron en la segunda parte y pudieron lograr una trabajada victoria que les coloca segundo en la clasificación: tercera victoria consecutiva y sin encajar gol, siete partidos sin perder con seis victorias y un empate y cuarta victoria seguida en casa.
Los blanquiazules no tuvieron la fluidez ni el dinamismo de partidos anteriores y con un juego lento y previsible apenas llegaron a las inmediaciones de Cheng. Tenían más posesión de balón los de José Manuel Aira pero todos los pases eran al pie y tampoco desde la parcela central encontraban a los hombres de banda.
El Racing Rioja había dispuesto una tela de araña con muchos efectivos en el centro del campo y el filial babazorro cayó en sus redes porque el juego no pasaba del centro del campo. El atasco de los locales beneficiaba a un Racing Rioja que con el paso de los minutos cumplía su primer objetivo de no encajar gol. Y así ocurrió, el primer acto fue transcurriendo minuto a minuto sin que el Alavés B pudiera romper en ningún momento el dispositivo defensivo del rival fruto su ritmo de juego cansino y sin capacidad para generar pases en profundidad o llegadas por las bandas.
Aunque en el tramo final del primer tiempo los blanquiazules mejoraron algo, no les dio para fabricar ocasiones de gol. Tras el descanso los babazorros encontraron una vía de agua por la banda izquierda de los racinguistas por la que Mariano entró como quiso por dicho carril y colgó al área infinidad de balones que, o bien no encontraron rematadores, los remates finales no encontraron portería o se toparon con Cheng, el mejor de los riojanos.
La ocasión más clara en este segundo acto de asedio local fue un disparo de Guti al poste. El propio centrocampista cogió el rechace tras su remate pero no supo definir ante Cheng. En esta segunda parte tuvieron una incidencia decisiva los cambios realizados por Aira.
El entrenador local quiso dar más mordiente atacante a su equipo e hizo saltar al césped a Maroan y a Romera. La entrada de ambos fue decisiva, sobre todo la del primero que le dio más intención al ataque local. Fue el encargado de abrir la lata tras aprovecharse de un rechace tras disparo suyo y ahora sí, por fin, superar al portero visitante, que había sido un muro hasta ese momento. Con la ventaja en el marcador, minutos después Romera sentenció el partido anotando un gran gol. En concreto, superó a Cheng con una vaselina desde fuera del área desatando la euforia entre los pupilos blanquiazules, que hasta ese momento no vieron claro un desenlace favorable. Un triunfo que merecieron tras realizar una gran segunda parte ante un rival que no creó peligro sobre la portería de Adrián Rodríguez en ningún momento.