Los elevados precios de la vivienda que regían en los últimos años han bajado hasta el 50% en el País del Bidasoa, a los niveles anteriores a la burbuja inmobiliaria, según el Instituto Nacional de la Vivienda y los más importantes y conocidos portales inmobiliarios. Aunque el sector de la construcción está casi paralizado y las operaciones de compra venta se limitan a la de segunda mano en su totalidad.
El precio medio de venta de la vivienda en Navarra se calcula en 1.682 euros/m2 en el primer semestre de 2022, lo que representa una reducción del 50,4% en relación a su precio máximo (3.395 euros/m2) de febrero de 2007. Navarra es la segunda comunidad con el mayor descenso del precio sobre el máximo alcanzado en la burbuja inmobiliaria en 2008.
En la cuenca del Bidasoa, el precio medio de la vivienda se sitúa ahora en los 1.300/1.500 euros/m2., la mitad de lo que ocurría en 2008, cuando se avecinaba el brutal estallido de la burbuja inmobiliaria. En algún caso, las viviendas nuevas ofertadas a 300.000 euros entonces en el Valle de Baztan ahora se venden por 150.000 y menos, y siguen en idéntica situación.
compra venta En el ejercicio actual y con referencia a los municipios con más habitantes de la comarca, la compra venta se dirige en su totalidad a las viviendas de segunda mano o calificadas de “antiguas”, lo que aporta dos lecturas distintas. En el Valle de Baztan (7.863 habitantes), las transacciones en el segundo trimestre, en información del Ministerio de la Vivienda, fueron 16, el 5.88% menos que en igual trimestre de 2021 y de ellas ninguna de viviendas nuevas y todas de segunda mano. A final de junio, el total de operaciones fue de 37, el 37.04% mas que en el mismo periodo del pasado año, cuando fueron 27 las registradas.
En Bera (3.759 habitantes) y en abril, mayo y junio, las transacciones fueron 10, el el 100% mas que en el mismo trimestre de 2021 y todas de segunda mano. El total de los dos primeros trimestres fue de 17, el 13.33% mas que en el mismo periodo de 2021, cuando se registraron 15.
Las operaciones en Lesaka (2.744 habitantes) fueron 5, igual que en el mismo trimestre del año pasado, todas de segunda mano. Y en total hasta junio, se registraron 9, el 10% menos que en el mismo periodo de 2021 cuando fueron 10. Por su parte, en Doneztebe (1.826 habitantes) la compra venta registrada fue de 3 viviendas, el 57.14% menos que en el mismo trimestre de 2021, también todas de segunda mano. Y hasta junio, las operaciones fueron 7, el 53.33% menos que las 15 del mismo periodo del año pasado.
sobra oferta El incremento de viviendas existentes superó de largo la demanda, ya no se diga del movimiento demográfico, en lenta pero progresiva recesión. Desde 1995, el censo comarcal de viviendas, en el espacio comprendido entre Dantzarinea (Urdax), a Ezkurra (Malerreka y Endarlatsa), en la muga con Guipúzcoa, se incrementó con más de 1.428 viviendas de nueva construcción.
La construcción de viviendas está parada y el sector se dedica a la rehabilitación.
La “burbuja” inmobiliaria llegó con retraso aunque se manifestó imparable en una década. Además de la ya existente se construyó en exceso, y menos de 300 nuevas construidas (exactamente, 287) eran viviendas de promoción oficial (VPO) o acogidas a ayudas oficiales (el 20%) y el resto de promoción privada y de precio libre.
El censo inmobiliario, en concreto, aumentó en Baztán en 797 viviendas, en Xareta (Urdax y Zugarramurdi) se construyeron 43 viviendas, en Bertizarana las construidas en cinco años fueron trece, en Malerreka se contabilizaron 741 viviendas nuevas a pesar de que 480 (de ellas 187 en Doneztebe), estaban vacías, y en Bortziriak se construyeron nada menos que 811 viviendas. En todos los casos, llamaba la atención el muy escaso número de nuevas viviendas con la calificación de VPO o acogidas a ayudas oficiales.
MUCHAS VACÍAS
El número de viviendas en la comarca es de 10.623 (8.208, en 2001), de las que 189 están en Urdax y 129 en Zugarramurdi, en el Valle de Baztan se cuentan 3.752, 356 viviendas en Bertizarana (Oieregi, Narbarte y Legasa), 2.225 en Malerreka y 3.984 en Bortziriak, pero 2.115 viviendas (la quinta parte) vacías, aunque todas no estén en venta ni mucho menos.
En el Valle de Baztan se estima que las viviendas desocupadas en la actualidad son unas 923 (una de cada cuatro del total existente), En Bera unas 360 están desocupadas, y en Lesaka son 225 vacías de las 1.112 del último censo.
El mercado de viviendas se limita en la actualidad a las de segunda mano o “antiguas”, con compradores, algunos de ellos foráneos que optan por el medio rural, por asentarse y vivir en la comarca o como segunda residencia. El actual estado de cosas al menos ayuda a ocupar las viviendas que estaban vacías, pero mientras el sector de la construcción se debe ocupar sobre todo en la rehabilitación y, logicamente, no crea empleo.