Los turistas vascos que fueron testigos del terremoto que ha causado más de 2.000 víctimas mortales en Marruecos, han comenzado a llegar este domingo al aeropuerto de Loiu, donde sus familiares les han recibido entre abrazos y lágrimas.
Esta mañana han aterrizado en el aeropuerto de Loiu dos aviones procedentes de Marrakech en los que regresaban turistas vascos y personas de Marruecos residentes en Euskadi que vivieron el devastador movimiento sísmico de 7 grados en la escala Richter que se produjo el viernes por la noche.
Los viajeros han sido recibidos por amigos y familiares que les esperaban con flores, con globos y hasta con una pancarta de bienvenida y que les han abrazado.
"Tranquila, ama, tranquila. Ya ha pasado", decía un joven mientras abrazaba a su madre que ha roto a llorar emocionada nada más verle.
También ha sido emotiva la llegada de un padre y su hija, que se han fundido en un abrazazo a la madre y la segunda hija de la pareja. La mujer y una de las niñas tuvieron que interrumpir sus vacaciones por una enfermedad de la niña y regresaron días antes del terremoto.
Tras esos primeros instantes de lágrimas, los testigos del terremoto han contado a sus familias la "incertidumbre y "el miedo" que vivieron en los primeros instantes cuando sintieron "temblar el suelo".
El primer avión ha llegado a Euskadi hacia las 7 de la mañana y el segundo avión ha aterrizado a las 12;45 horas, ambos procedentes de Marrakech.