Nada pudo salir peor en la visita al Camp Nou. Desarbolado desde el pitido inicial y con un insalvable 3-0 en el marcador en apenas 22 minutos, el Athletic firmó una noche para el olvido en la que todo lo que pudo ir mal, fue aún peor. No solo en el resultado salieron trasquilados los rojiblancos, también en el apartado médico, pues dos fueron los jugadores que tuvieron que abandonar el terreno de juego antes de lo deseado por sendas lesiones musculares. Fueron, paradójicamente, un Ander Herrera que tuvo que salir del campo contrariado en el minuto 21 y un Dani García que se encargó de sustituirle sin suerte al tener que ceder también su lugar en el campo a Oihan Sancet a la hora de juego por otro percance físico.
Son dos bajas prácticamente seguras para el próximo envite liguero ante el Villarreal en San Mamés, cita en la que ninguno de los dos centrocampistas apunta a poder estar a disposición de Ernesto Valverde, quien lamentó desde la banda el traumático desarrollo de un encuentro en el que no hubo nada positivo que rescatar. Con 2-0 ya en el luminoso, en medio del festín blaugrana, llegó la primera lesión de la noche. Ander Herrera, en su segunda titularidad consecutiva, se vio obligado a pedir el campo abandonando por su propio pie, cabizbajo, un terreno de juego en el que apenas pudo entrar en contacto con el balón.
Se trata del segundo contratiempo muscular que sufre el bilbaino desde su regreso a Bilbao, pues ya causó baja en la visita al Elche por una leve distensión muscular que solo le apartó del verde en una jornada de LaLiga. Volvió contra el Rayo Vallecano en San Mamés, repitió papel de revulsivo contra el Almería e hizo lo propio en la visita al Sevilla, en la que fue expulsado. De vuelta frente al Getafe en El Coliseum, firmó su primera asistencia del curso con un magnífico pase a Iñaki Williams y este domingo, en el Camp Nou, sufrió un nuevo percance físico por el que deberá someterse a pruebas médicas al igual que Dani García, quien se marchó entre lágrimas tras caer lesionado en el minuto 60.
Hundido
En el caso del mediocentro de Zumarraga se trata de su primera dolencia desde que dejara atrás una pubalgia el pasado curso. A la espera de conocer el alcance exacto de una lesión que podría dejarle fuera de combate hasta después del parón por el Mundial de Catar, la imagen que dejó el ’14’ del Athletic no pudo resultar más descorazonadora. Si bien salió del campo por su propio pie como Ander Herrera, nada más llegar a la zona de banquillos se apoyó sensiblemente afectado sobre el doctor Josean Lekue, quien trató de animarle en la medida de lo posible ante la desesperación del futbolista.
Consciente de que a buen seguro deberá frenar en seco e iniciar un proceso de recuperación antes de volver a estar a disposición de Valverde, Dani García fue el segundo jugador tocado y hundido que dejó la aciaga visita al el Camp Nou, donde más allá de las desgracias en forma de lesiones no hubo rastro de la competitividad de un equipo que dejó las peores sensaciones posibles al no ofrecer resistencia alguna ante los de Xavi Hernández, quienes se divirtieron de lo lindo en medio de la pesadilla rojiblanca.