Landeta y Mayo, jugadores del Arenas, quieren volver a eliminar al Lugo

El destino puede llegar a ser muy caprichoso en el mundo del fútbol. De ello pueden dar fe Joritz Landeta (Mungia, 10 de octubre de 1995) y Markel Mayo (Bilbao, 16 de mayo de 2000). Los dos son jugadores del Arenas, el primero, portero, y el segundo, centrocampista. Y los dos se enfrentarán el sábado en Gobela en Copa al Lugo, equipo de Segunda División, por segunda vez, después de que lo hicieran el 8 de diciembre de 2019 en Las Llanas cuando militaban en las filas del Sestao River, que competía en la antigua Tercera División. Entonces, el conjunto verdinegro superó la eliminatoria y apeó al Lugo en la tanda de penaltis tras el 1-1 con el que se cerró el tiempo reglamentario, en una cita en la que tanto Landeta como Mayo tuvieron sus respectivas cuotas de protagonismo. El guardameta detuvo el penalti que a la postre supuso la clasificación y el centrocampista, que no jugará el sábado por lesión, rindió a un alto nivel durante la hora que participó. Eliminado el Lugo, el Sestao se midió en la siguiente ronda al Athletic. “Ojalá vuelva a repetirse la misma historia”, dicen al unísono los dos futbolistas del Arenas.

El partido de Copa llega en un buen momento para el Arenas, segundo clasificado del grupo II de Segunda RFEF recorridas las diez primeras jornadas. “En diez partidos solo perder dos y empatar otros dos es un bagaje bastante positivo. Ahora toca jugar ante los equipos que están abajo, pero sabemos que no serán fáciles y no podemos pinchar, porque son los partidos que te marcan dónde estaremos a final de liga”, reflexiona Landeta. Mayo añade otro matiz: “Sumar 20 de 30 puntos posibles retrata que estamos haciendo un buen trabajo y quiere decir que si seguimos así, estaremos arriba. No podemos relajarnos, porque cualquier equipo te puede ganar”. Pero toca aparcar la liga y poner el foco en el expectante duelo de Copa en Gobela, que vuelve a acoger un partido del torneo del K.O. 38 años después. “Sabemos que tenemos poco que perder y mucho que ganar. Es un equipo de Segunda División y en teoría deberían ganar ellos, pero a un partido puede pasar cualquier cosa”, expresa el guardameta, en tanto que el centrocampista, que se recupera de la intervención quirúrgica a la que ha sido sometido en su mano izquierda, se detiene en lo que significa esta competición para la entidad rojinegra, que conquistó el título de Copa en 1919, tal como reza en una llamativa leyenda detrás de una portería de Gobela: “Es un premio y espero que venga mucha gente. En este campo, cualquier rebote o detalle puede ser gol”.

La casualidad ha querido que los dos futbolistas vivan una especie de flashback en su reencuentro con el Lugo en Copa, momento en que recuerdan algunos pasajes de aquella noche mágica en Las Llanas. “El Lugo nos empató en el 92 y pensábamos que en la prórroga estábamos casi muertos, pero el equipo respondió muy bien, de hecho no nos llegaron más y tuvimos la suerte de pasar en la tanda de penaltis”, relata Landeta, que pone el acento en la ruleta rusa que supone los fatídicos lanzamientos: “Paré el sexto suyo y luego Iván (Alonso) metió el último que nos dio el pase. Fue una noche inolvidable. Recuerdo que teníamos el viento en contra y los tiros iban más fuertes; y tuve la intuición de acertar por dónde lo iba a tirar y la fortuna de pararlo”. Mayo rememora que lo suyo fue una aportación más colectiva: “Jugué de titular, cuando no solía jugar. Se trataba de una gran oportunidad para un equipo de Tercera División de poder eliminar a uno de Segunda. Estuvimos peleando y sí es cierto que sufrimos, pero quizá no tanto como esperábamos”.

El de Mungia, que entrena por las mañanas con el Arenas y por las tardes cumple jornada laboral en su puesto de trabajo, pone el acento en el beneficio que aporta el actual formato para los clubes modestos: “Ese fue el primer año en que entró en vigencia y sí es más mediático para equipos como el nuestro. Si no recuerdo mal, también cayó el Alavés de Primera División y el Extremadura, de Segunda, ante el Portu. Es un buen escaparate para los jugadores y también para el club, le da un toque especial”. Mayo, que cursa Ingeniería Industrial en la UPV, reconoce que con la nueva dimensión de la Copa “se da más oportunidades a los equipos humildes” y avanza que el conjunto gallego mantiene a dos jugadores, el delantero Manu Barreiro y el defensa ucraniano Orest Lebedenko, respecto al equipo que él y Landeta se midieron cuando ejercían en el Sestao River. “Son corpulentos, de mucho físico e imagino que buscarán el juego directo en un campo como este”, analiza Landeta. Tienes que intentar hacer que el partido se haga corto y aprovechar nuestras oportunidades”, sentencia Mayo.