Lanzar un mensaje de concienciación social a través de las artes escénicas

Trasladar un mensaje de concienciación social a través de las artes escénicas utilizando como lengua vehicular el euskera. Este es lei motiv del musical de Jaso ikastola de Pamplona, un proyecto que nació hace una década y que permite a medio centenar de estudiantes de ESO crear un musical desde cero. En su diseño, el alumnado, que de manera voluntaria se implica en esta iniciativa, trabaja competencias desarrolladas en casi todos los ámbitos : Ciencia, Tecnología, Arte, Matemáticas, Educación física y Literatura. Y el resultado, tal y como queda reflejado todos los años en los mejores teatros de Navarra y la CAV, es espectacular. Así lo corroboran los diversos galardones que ha recibido en todo este tiempo. Destacan el premio Alzheimer Social concedido por la Sociedad Española de Neurología, por su valor educativo y divulgativo en 2021 o el otorgado dos años antes por el Ministerio de Educación, que lo calificó como Proyecto Educativo Inspirador.

En esta ocasión, este musical se encuentra entre las trece iniciativas de vanguardia seleccionadas por los X Premios a la Innovación Educativa y Experiencias Docentes Innovadoras SIMO EDUCACIÓN. En concreto ha sido galardonado con el premio a la mejor experiencia STEAM (de las siglas en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería,#Arte y Matemáticas). Y es que para la creación del musical, los estudiantes emplean las competencias desarrolladas en esos ámbitos además de trabajar aspectos relacionados con la Educación Física y la Literatura. “Aprendiendo de profesionales, crean un guión, letras de canciones, coreografías, comunicación, cartelería, escenografía y diseño de iluminación y sonido”, explican los profesores implicados Imanol Janices, Irantzu Zabalza y Dabid Albira.

Cada año, el musical aborda una temática social concreta, que se consensúa entre los estudiantes que participan en el proyecto. “Son los y las alumnas las que deciden el tema sobre el que va a girar le musical, cuestiones que les preocupan o les genera interés. Hemos abordado la enfermedad de Alzheimer, la memoria histórica, la diversidad sexual, el papel de la mujer en la sociedad o el respeto por el medio ambiente”, explican estos docentes, que recuerda que, al final de curso, el musical se representa en los mejores teatros de Navarra y de la CAV frente a miles de escolares de Primaria y ESO de otros centros educativos.

Este verano, con el apoyo del Gobierno foral y Euskaltzaindia, el musical, que cumple diez años, cruzó el charlo y se representó en el congreso de Teatro en Educación IDEA#drama en Islandia. “No pudieron ir todos los estudiantes, estuvieron 28, pero fue una experiencia muy interesante”, remarca Janices.

Asimismo, el espectáculo tiene asociadas unas unidades didácticas, creadas por el profesorado, que trabajan la temática social de cada año. “Estas unidades se envían a los centros escolares creando un aprendizaje servicio. Los centros trabajan las unidades didácticas, que además tienen asociado un videoclip también creado por el alumnado”, explica este profesor.

voluntario La participación en este musical, el proyecto estrella de la ikastola, es voluntaria y suele rondar los 50 estudiantes. “Solemos trabajar durante los recreos, algunas tardes, los domingos... y algunas cuestiones se abordan de manera transversal en algunas asignaturas”, explica Janices, que reconoce que “el alumnado de 1º suele esperar a ver qué tal le va en la nueva etapa de Secundaria y si van bien, se apuntan en 2º curso”.

Los estudiantes, tal y como explican estos profesores, “se apuntan a la disciplina que más les motiva: bailar, cantar, tocar instrumentos, escribir el guión, dibujar... Tenemos varias áreas de trabajo y primero ellos se inscriben y luego demuestran sus habilidades. Si vemos que su elección no es la que mejor les va les orientamos hacia otras áreas. Y finalmente pasan al grupo formativo”. La lengua vehicular, remarcan, es siempre el euskera, es uno de sus principales objetivos”.

Estos profesores reconocen que los premios siempre son un aliciente. “Como docentes nos recuerda que estamos haciendo un buen trabajo y nos anima a seguir adelante. Además nos hace especial ilusión por los chavales. El ver que nuestros chicos y chicas salen adelante y aprenden supone una gran satisfacción”, aseguran.