Las bajas por enfermedad común se dispararon en Navarra durante el 2022 y alcanzaron máximos históricos, con 9,18 % más con respecto al 2021, lo que ha supuesto que el 32,39 % de la población protegida por Mutua Navarra haya sufrido al menos una baja por Contingencia Común en 2022, frente al 28,3 % del 2021 o el 25,47 % del 2020.
Estos datos se incluyen en el Octavo Barómetro de Absentismo, elaborado por Mutua Navarra, un estudio anual que recoge datos de las empresas asociadas a la entidad que protege a más de un 37 % de la población trabajadora de la Comunidad foral.
Por actividades, el sector de la construcción es el que obtiene peores datos de evolución: incrementa tanto la incidencia (17,73 %) como el número de jornadas perdidas por persona (12,14 %). Otros de los sectores que han sufrido un mayor aumento han sido el de agricultura y el de servicios.
Según indica Mutua Navarra en una nota, la incidencia de las bajas por contingencia común también continúa al alza alcanzando un 18,82 % más que en 2021. Por rangos de edad, los jóvenes de entre 20 a 39 años siguen siendo los que obtienen una mayor incidencia de bajas, aunque a partir de esa edad, baja la relación entre bajas generadas y población protegida.
Las bajas relacionadas con la salud mental se incrementaron un 15,86 % (que se suma al 16,96 % de 2021) con un aumento del 19,73 % en jornadas perdidas.
La incidencia de las patologías musculo-esqueléticas crecieron un 19,45 % (que se añaden al aumento del 20,02 % de 2021) mientras que las jornadas perdidas por este motivo ascendieron un 12,7 %.
Estos resultados nos señalan "dos de los principales retos a los que nuestras empresas van a tener que hacer frente, que son el desarrollo de programas relacionados con la promoción de la salud mental y los orientados a la mejora del sistema osteo-muscular", explica el director del Área de Empresa Saludable de Mutua Navarra, Javier Igea.
La incidencia en los accidentes de trabajo disminuye levemente (0,67 %) durante el pasado 2022. Sin embargo, el sector de la construcción sufre un aumento que alcanza el 20,1 %. Paralelamente, la incidencia de los accidentes graves o mortales baja un 4,22 % y las jornadas perdidas un 9,94 %.
No obstante, las mismas fuentes advierten de la necesidad de continuar mejorando los sistemas de Prevención de riesgos laborales de manera continua, y actualizándolos a las nuevas fuentes de riesgos y cambios en el trabajo que se producen de manera constante.
"En los aspectos de Prevención de riesgos laborales cualquier relajamiento se paga demasiado caro, hay que seguir trabajando por integrar una cultura de la seguridad en el día a día de cada persona y de cada organización", afirma Javier Igea.
Además, en cuanto a la situación de bajas relacionadas con la COVID19, el informe refleja que tuvieron un impacto significativo hasta el mes de Julio, siendo el mes de Enero en el que se concentró el 50% de las bajas anuales por este motivo. Tras el verano la incidencia ha sido muy inferior.