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Bizkaia

Las Comunidades de Propietarios ante el reto del Invierno

Comunidades con calefacción central
Comunidades con calefacción central

En un contexto en el que día tras día el precio de la energía, electricidad y gas, abre los informativos televisivos y ocupa a expertos y tertulianos en profundos debates, avanzándonos un escenario muy complicado, las Comunidades de Propietarios deben hacer frente al inicio de la temporada de calefacción puesto que se avecina el invierno

Los elevados precios de la energía, motivados por la inestabilidad internacional, como consecuencia de la guerra de Ucrania, y a nivel local, por la interacción entre el precio del gas natural y el precio del mercado mayorista eléctrico, como resultado de que son las centrales de ciclo combinado, cuya materia prima es el gas natural, las que marcan el precio en la gran mayoría de las horas donde la demanda no queda satisfecha con hidráulicas, nucleares o renovables , dibujan un escenario difícil para este invierno.

Ante esta situación desde la Asociación de Mantenedores de Instalaciones de Calor y Frío de Euskadi, organización en la que están integradas la mayor parte de las empresas de Mantenimiento que prestan servicios en las Instalaciones Centralizadas de Calefacción, tanto en edificios residenciales como terciarios, queremos ofrecer algunos consejos a propietarios, empresas de mantenimiento y administradores de comunidades de propietarios que les permitan al menos disfrutar de calor este invierno sin excederse en el gasto. 

En primer lugar, todos debemos entender que la distribución del consumo energético en viviendas y edificios depende de:

• la zona climática donde se ubique la vivienda o edificio.

• la orientación.

• la calidad constructiva.

• el nivel de aislamiento.

• el grado de equipamiento.

• el uso de los equipos.

Esta es la razón por la que unos edificios consumen más que otros y contra esto sólo caben soluciones estructurales, como son las actuaciones en fachadas mejorando el aislamiento, sustitución de generadores térmicos por otros de mayor eficiencia, en definitiva, soluciones con desembolsos económicos importantes.

Ahora bien, la experiencia y los consejos de las empresas de mantenimiento nos pueden ayudar a ahorrar sobre aquellos servicios que tienen mayor peso sobre el consumo final de energía de un edificio, la calefacción, que demanda el 47% del total, los pequeños electrodomésticos con casi el 22% de la tasa total, y el agua caliente sanitaria (ACS) que representa el 18,9%.

Cómo ahorrar energía en las Comunidades de Propietarios

Para poder determinar las posibilidades de ahorro con las que cuenta una Comunidad de Propietarios, primero se deben estimar las medidas que son necesarias adoptar para alcanzar altos niveles de bienestar con el mínimo consumo de recursos energéticos, manteniendo siempre la calidad de los servicios.

Una vez conocidas es cuando la Comunidad de Propietarios debe plantearse la adopción de medidas encaminadas a ahorrar energía. En nuestro caso y desde nuestra posición como representantes de empresas del Sector de Mantenimiento de Instalaciones de Calor y frío vamos a referirnos a las posibilidades de ahorro de energía en las instalaciones centralizadas de calefacción y producción de agua caliente sanitaria.

10 Medidas para ahorrar energía en la explotación y mantenimiento del edificio. #ConsultacontuMantenedor. 

1. Adecuar la temperatura interior, durante las horas de funcionamiento a los valores reglamentarios del Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios, 21º…23º.

2. Instalar sistemas de control que regulen la temperatura del agua en función de las condiciones exteriores, permite el ajuste de la curva de calefacción que es una de las medidas más eficaces para ahorrar energía. La curva tiene por objeto el control de la caldera o generador para que caliente las estancias de un edificio o vivienda a una temperatura confortable y lo más constante posible, aunque cambien las temperaturas exteriores. La temperatura del agua de la calefacción aumenta cuando la temperatura exterior disminuye y viceversa. La curva deberá ajustarse dependiendo del tipo de caldera, calefacción (suelo radiante, radiadores, ventiloconvector), de las temperaturas exteriores, de la estación del año, así como del grado de aislamiento térmico del edificio o vivienda.

3. Instalar válvulas termostáticas en los radiadores, es una medida que permite controlar la temperatura de cada estancia y por tanto ahorrar energía.

4. Optimizar la puesta en marcha y parada del sistema. El IDAE aconseja “ajustar el encendido de la calefacción al horario real de ocupación de las viviendas y apagarla por la noche, ya que cuando estas acostado y arropado no es necesaria la calefacción”.

5. Eliminar o reducir el funcionamiento de los radiadores que climatizan zonas no críticas del edificio, como huecos de escaleras, entradas, pasillos, trasteros etcétera.

6. Eliminar cualquier obstáculo a la libre emisión de calor hacia las estancias desde los radiadores, como cortinas, muebles, cubrerradiadores, etcétera.

7. Aislar los techos y los suelos de la última y primera planta del edificio, respectivamente.

8. Reducir las pérdidas de la red de distribución, conservando y mejorando el aislamiento de las tuberías, siempre manteniendo los espesores mínimos que marca el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios.

9. Aislar o mejora el aislamiento del Cuerpo de Calderas con un espesor tal que la temperatura superficial sea inferior a 35ºC.

10. Ajustar de la bomba de circulación. Lo ideal es la instalación de una bomba electrónica que realice el ajuste automático de la velocidad del flujo (circulación del agua) adaptándose a la potencia demandada.

Y recuerde, un esmerado servicio de mantenimiento le permite conservar los equipos de la instalación en sus niveles óptimos de rendimiento.

2022-10-11T12:15:05+02:00
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