Las empresas vascas muestran una visión "moderadamente pesimista" sobre la evolución de la economía para el primer trimestre de 2022, según la encuesta de Confianza Empresarial elaborada por Laboral Kutxa, que refleja un cambio de dirección respecto a los resultados del trimestre previo. Las expectativas empresariales para los tres primeros meses del nuevo ejercicio empeoran en la mayoría de indicadores y muestran "un empeoramiento" y cambio de tendencia en relación a lo que esperaban las empresas para estos últimos meses, de forma semejante a lo ocurrido con la evolución de la pandemia.
La encuesta, realizada a 400 empresas de la CAV, sitúa el valor del índice de confianza para el primer trimestre de 2022 en 47,8, lo que implica una caída respecto al anterior, los últimos tres meses de este ejercicio, cuando fue de 55,6. En relación al entorno económico, el 42,1% de las empresas cree que empeorará con respecto al trimestre actual, por lo que predomina una visión "poco optimista" acerca de la evolución de la economía. Por otra parte, las previsiones de las empresas en cuanto a facturación indican "cierta estabilidad" de cara al primer trimestre de 2022. En concreto, el 23,4% de las entidades encuestadas consideran que la facturación mejorará, siendo el 53,3% las que estiman que será similar, frente al 23,4% que consideran que empeorará.
La duda que surge es el comportamiento de las claves sobre las que se sustentan las expectativas de facturación y actividad: las cantidades vendidas y los precios. En este sentido, los resultados apuntan a una cierta estabilidad en los pedidos y una subida de los precios y, en concreto, el 21,1% de los encuestados espera que el volumen de pedidos se incremente y el 23,4% que empeore, frente al 55,6% que piensa que será similar al trimestre actual. En relación a los precios, los resultados se reparten principalmente entre el 29,5% que considera que serán superiores y el 50,6% que estima estabilidad en los mismos.
Por su parte, la opinión acerca de las expectativas de la rentabilidad de las operaciones acumula el 89,6% de las respuestas en el valor "inferior" e "igual" y un 10,3% espera obtener rendimientos superiores. Estos datos, según Laboral Kutxa, ofrecen un panorama menos positivo que los trimestres previos y las empresas, ante una situación en la que se estima "cierta ralentización, detienen algo los planes de inversión". En relación al volumen de inversión, el 15,7% de las empresas consideran que se incrementará durante el primer trimestre de 2022 y el 20,7% cree que disminuirá. Por tanto, el 63,6% de los encuestados piensa que se mantendrá.
En materia de empleo, el 77% de las empresas consideran que se mantendrá, frente al 11,5% cuyas expectativas pasan por incrementar la plantilla, porcentaje idéntico a las que se inclinan justamente por lo contrario.
Zona de contracción
Según Laboral Kutxa, si se agregan los indicadores anteriores, exceptuando la opinión acerca del entorno, ponderándolos para obtener el valor del Índice de Confianza, el resultado es 47,8, lo que supone una caída en relación al trimestre anterior (55,6). Por lo tanto, las empresas mantienen una visión moderadamente pesimista con respecto a la evolución de la economía de cara al primer trimestre de 2022. El valor del índice por debajo de 50 implica estar en zona de contracción, y es más negativo que los valores obtenidos para otros ámbitos geográficos de interés como España (dato octubre: 56,2) o la propia Zona Euro (dato octubre: 54,2).
En la encuesta se han incorporado dos preguntas adicionales dada la relevancia de los Fondos Next Generation, una relativa al conocimiento de los mismos y otra al acceso por parte del tejido encuestado. Los resultados son que el 58,8% de las empresas conoce el plan y sólo el 16,6% ha accedido a fondos.
Los datos
Índice de confianza. La encuesta sitúa el valor del índice de confianza para el primer trimestre de 2022 en 47,8, una caída respecto al anterior, cuando fue de 55,6.
Entorno económico. El 42,1% de las empresas cree que el entorno económico empeorará, por lo que predomina una visión "poco optimista" acerca de la evolución de la economía.
Facturación. El 23,4% de las entidades encuestadas consideran que la facturación mejorará, siendo el 53,3% las que estiman que será similar, frente al 23,4% que consideran que empeorará.
Pedidos. El 21,1% de los encuestados espera que el volumen de pedidos se incremente y el 23,4% que empeore, frente al 55,6% que piensa que será similar al trimestre actual.
Empleo. El 77% de las empresas consideran que se mantendrá el empleo, frente al 11,5% cuyas expectativas pasan por incrementar la plantilla, porcentaje idéntico a las que se inclinan por lo contrario.