Las instituciones aspiran a que Euskadi esté en 2040 entre las regiones más ricas

El Gobierno vasco lanzó ayer jueves un proyecto para definir las “bases del futuro de Euskadi” con objetivos muy ambiciosos entre los que destacan reducir la tasa de paro al 6% –actualmente es de un 8,5%–, estar entre el 10% de las regiones europeas con mayor renta por habitante y por ende, estar entre las regiones europeas con menor tasa de pobreza.

El lehendakari Iñigo Urkullu, la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, así como los Diputados Generales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y los alcaldes de las tres capitales vascas, participaron ayer en una reunión de trabajo en el seno de este proyecto, denominado Competitividad para el bienestar de Euskadi 2040: una reflexión para la acción. En ella, dieron continuidad a este proyecto que comenzó con su primera fase de contraste en marzo de 2022 y cuyas conclusiones fueron compartidas con las instituciones.

El objetivo del proyecto es identificar los cambios que se están produciendo en los retos de competitividad de Euskadi, para construir un modelo de bienestar sostenible e inclusivo para la siguiente generación, de manera colaborativa, aunando conocimiento y esfuerzos de todos los agentes del territorio.

La apuesta del Gobierno vasco pasa por construir una Euskadi competitiva para mejorar el bienestar de la ciudadanía. Su objetivo es convertir Euskadi en un territorio próspero, innovador, conectado, comprometido, inclusivo y sostenible. Un lugar diferenciado y de referencia en Europa, atractivo para vivir y al que contribuir.

“El hexágono vasco”

Tal y como explicaron, la definición de la Competitividad de Euskadi 2040 se proyecta atendiendo a seis dimensiones recogidas en lo que el trabajo define como “el hexágono vasco”: EuskadiVerde, próspera, innovadora, inclusiva, comprometida, y conectada.

Según la primera meta que define el proyecto de EuskadiVerde, para 2040 Euskadi deberá contar con avances sustanciales hacia la meta de cero emisiones netas de gases de efecto invernadero a través de la descarbonización efectiva de la economía.

Por otro lado, deberá garantizar la sostenibilidad económica del modelo de bienestar y servicios públicos de calidad construidos hasta hoy, a través de la disponibilidad de empleo y renta adecuadas para todas las personas y así, poder cumplir el objetivo de prosperidad. De igual modo, deberá afrontar las desigualdades verticales (entre los que más y menos tienen) y horizontales (entre diferentes colectivos) a través de servicios públicos de calidad.

Euskadi basa su ventaja competitiva en el desarrollo de su capacidad de innovación, siempre dirigida a responder a necesidades de la sociedad o del sistema productivo. Además, el Gobierno vasco toma como compromiso mantener su identidad propia de manera dinámica, construyendo un sentimiento de comunidad y contando con un alto nivel de compromiso social, político y empresarial con el territorio.

Por último pretende que su modelo de desarrollo económico-medioambiental-social sea un referente en el plano internacional, estando abierta al mundo, compartiendo conocimiento, financiación y capital humano, pero con conciencia global y en coherencia con parámetros de desarrollo sostenible y justicia social.

Desde 2021

La fase inicial arrancó en 2021 y dio como resultado un primer Documento Sintético de Euskadi 2040 presentado en el Consejo de Gobierno del 15 de febrero de 2022. Este planteamiento inicial recogía las bases para el diseño de la competitividad al servicio del bienestar de Euskadi en el que se hizo un análisis del posicionamiento y un análisis de la proyección de Euskadi.

A partir de marzo de 2022 y hasta el presente mes de septiembre, se ha desarrollado la primera fase de contraste.