Si las ofertas para trabajar como camarero o camarera son en muchas ocasiones indignas, con unas condiciones laborales que rozan (o alcanzan) la explotación, el colmo es que además de aceptarlas te pongan mil normas sobre tu aspecto físico que pueden incluso condicionar tu vida o tus gustos en tu vida personal, porque hay que recordar que hay vida más allá del trabajo.
Normas para el nuevo personal
Es lo que ha compartido Jesús Soriano, el responsable de la popular cuenta presente en diversas redes sociales Soy Camarero, que se dedica a reflejar y denunciar situaciones de todo tipo que suceden en el sector del que es profesional. En este caso ha publicado un post con las normas que un listero ha enviado por WhatsApp a los aspirantes a camarero o camarera de una empresa hostelera que busca personal.
Entre los numerosos requisitos hay algunos que son de sentido común, porque se trata de no ofrecer una mala imagen, como que “se debe llevar el uniforme impecable (sin manchas y bien planchado)", pero hay otros que no parecen necesarios y que llegan a meterse en la vida personal de los profesionales.
"Corte de pelo tradicional"
Así “la presencia personal” obliga a llevar un “corte de pelo tradicional”, que en el caso de las camareras será “siempre con moño” y también un “color de pelo tradicional, sin degradados ni mechas escandalosas”. Además, prohíbe llevar las uñas pintadas, salvo en el caso de que sean “unicolor en colores claros y tradicionales”.
A los hombres se les obliga a acudir “afeitados o con la barba bien arreglada siempre”. Además “los tatuajes están prohibidos”, y en el caso de haberlos previamente “tendrán que ser maquillados para que no se noten”, descartando el uso de tiritas para ocultarlos. Tampoco están permitidos los piercings.
Mucha "jeta" con la puntualidad
La lista de normas es eterna, pero en el vídeo que ha subido, Jesús Soriano se centra en las más llamativas, como las referidas a la puntualidad. Así, la empresa afirma que el camarero será “penalizado y se marcará la hora de inicio media hora más tarde” aunque el retraso en estar “completamente cambiado” “sea por un solo minuto”. “Hay que tener jeta”, dice Soriano.
Además, la empresa anuncia que toda persona que llegue tarde y que lleve piercings en el momento del servicio “será sancionada”, algo que rebate Soriano: “No te pueden sancionar económicamente”.
Por si no fuera poco, también exige, como se ve en otra captura de pantalla, “una foto de cara y otra de cuerpo de todas las personas que quieran trabajar” con ellos. “Toda la persona que no cumpla los requisitos no podrá trabajar”, termina.
La publicación ha generado bastantes comentarios. Hay quienes que afirman que si la empresa quiere ofrecer una imagen determinada y lo avisa por adelantado es libre de poner sus normas y el aspirante a ese puesto puede aceptarlas o no. Pero también hay quienes lo ven excesivo y creen que son normas de hace 50 años.