En los primeros nueve meses del año Osakidetza ha realizado un total de 81.524 mamografías, un 60,4% más que entre enero y septiembre de 2020, cuando se llevaron a cabo 50.829. Este dato supone irse acercando a las cifras de 2019, antes de la pandemia del covid, cuando en ese mismo periodo del año se hicieron 89.572.
El Departamento de Salud del Gobierno Vasco dio ayer a conocer estos datos con motivo de la celebración hoy martes de la jornada contra el Cáncer de Mama. De esta forma se constata que el ritmo de realización de mamografías, que experimentó una ralentización especialmente a lo largo de 2020 por las medidas de seguridad ante el covid, se está recuperando en 2021 aunque todavía son casi un 9% menos (8,98%) que las que hicieron hasta septiembre de 2019, es decir 8.048 pruebas menos.
Un cuarto de siglo
Osakidetza puso en marcha hace 26 años el programa de detección precoz del cáncer de mama que ha permitido detectar cerca de 11.000 tumores, la mayoría en estadios precoces, en las más de 2,2 millones de mamografías hechas en este tiempo. El Departamento de Salud remarcó la importancia de la detección precoz para poder tratar a tiempo esta enfermedad, el tipo de tumor más frecuente en mujeres, y recordó cómo el programa de detección del cáncer de mama tiene una amplia aceptación en este colectivo ya que el 80% de la población a la que va dirigido ha participado en el mismo.
Concretamente la invitación se cursa a las mujeres de entre 50 y 69 años, así como a aquellas entre los 40 y 49 años con antecedentes familiares de cáncer de mama en primer grado (madre, hija, hermana). La prueba de mamografías se repite cada dos años y los resultados se emiten por carta en el plazo de 6 ó 7 días.