La Diputación de Gipuzkoa ha comenzado las obras de adecuación a la normativa europea en materia de seguridad en los túneles de Oindolar (sentido Pamplona) y Gorosmendi (sentido Donostia), en el tramo guipuzcoano de la A-15, Autovía de Leitzaran. Para llevar a cabo esas obras, hace unas semanas se instaló un baipás para regular el tráfico en ese tramo mientras duren los trabajos, lo que está previsto para la primavera de 2025.
Con el inicio de las obras se instalaron además dos radares en cada sentido, que controlan que se respete el límite de velocidad de 60 kilómetros por hora y con el objetivo, recalcan desde la Diputación de Gipuzkoa, de reforzar la seguridad en ese tramo en el que la circulación es de doble sentido por una sola de las calzadas.
Hasta ocho radares en menos de 25 kilómetros
La A-15 es una autovía de montaña, y por las características de la orografía del terreno y el número de túneles, las limitaciones de velocidad son abundantes. Además, esos límites están muy controlados, especialmente en el tramo guipuzcoano, donde se ubican la mayor parte de los túneles. Porque si desde Pamplona hasta el límite con Gipuzkoa no hay ningún radar fijo instalado, a partir del término municipal de Berastegi hay instalados cinco radares fijos en la Autovía de Leitzaran y la N-1 en sentido Donostia sin contar con los provisionales colocados por las obras.
- Túnel de Belabieta (Berastegi). 100 km/h.
- Salida del túnel de Belabieta (Berastegi). 100 km/h.
- Oindolar (Villabona). 100 km/h.
- Curva de Villabona (Villabona). 100 km/h.
- Andoain (Andoain, N-1). 80 km/h.
Además, si se sigue conduciendo hacia la capital guipuzcoana habrá que atravesar un radar más en Andoain hacia la Autovía del Urumea, o uno en Usurbil en la GI-11. Sin contar con los que encontremos ya en Donostia.
Menos radares en sentido Pamplona, pero el que más multa
Si circulamos desde Donostia hacia Pamplona, encontraremos un menor número de radares. Dependiendo de por qué salida de la capital guipuzcoana optemos, podemos pasar junto a los controles de velocidad instalados en la N-1 en Usurbil, Lasarte-Oria y Andoain.
En la A-15 el primer radar lo encontraremos ya en territorio navarro, en Lekunberri. Pero se da la circunstancia de que este radar es uno de los que más recauda a nivel estatal. Ubicado en una larga cuesta y limitado a 80 km/h, lleva años situado en el top diez de los que más multas impone, unas 45.000 el año pasado.