Las películas de superhéroes a las que nos tienen acostumbrados Marvel o DC son todo un mundo, parecen perfectamente engrasadas pero encierran muchos secretos. Y así lo atestiguan quienes lo han vivido trabajando desde dentro y han servido de inspiración para la serie La Franquicia, que llega a Max.
La producción aborda, en clave de comedia, los entresijos de estas producciones y se ríe abiertamente de la manera en que se abordan. Según la sinopsis oficial del proyecto, “el equipo de una franquicia cinematográfica poco querida se encuentra atrapado en el disfuncional, disparatado y alegre infierno de las franquicias del cine de superhéroes y lucha por tener su lugar en un universo cinematográfico salvaje y revoltoso. La Franquicia arroja luz sobre el caos y el secretismo en el mundo del cine de superhéroes, para plantear la pregunta: ¿cómo se hace exactamente un churro cinematográfico? Porque todas las cagadas tienen una historia de orígenes”.
Así pues, en La Franquicia nos encontramos una sátira que no ahorra al espectador el pensamiento de que el rodaje de la película objeto de la trama apunta más al fracaso que a un mínimo éxito debido a las visiones opuestas entre los equipos artístico, técnico y de los estudios, a quienes lo único que importa es la rentabilidad económica.
En el elenco de La Franquicia encontramos al británico Himesh Patel (Yesterday) o la estadounidense Aya Cash (El lobo de Wall Street), entre otros. Además de la colaboración del barcelonés Daniel Brühl (Malditos bastardos, Capitán América: Civil War).
Equipo de categoría
Brühl ha afirmado que “de todas las sátiras y comedias de Hollywood sobre este universo, pocas han sido tan específicas como esta. Interpreto a un cineasta europeo que quiere hacer algo decente, algo de arte, pero luego es tragado por esta máquina de franquicias. Hay tanta verdad en ella, tanta comedia maravillosa y desgarradora ... Es muy oportuna”.
La serie, que consta de ocho episodios de media hora de duración, cuenta con importantes avales en un equipo creativo del que forman parte Jon Brown, ganador de tres premios Emmy por su trabajo en Succession, mientras que Sam Mendes, ganador del Oscar por American Beauty, ha dirigido el piloto y es además productor ejecutivo.
De hecho, esta serie tuvo su origen, al parecer, en una charla de Mendes con el también creador Armando Iannucci en la que el primero habló de sus experiencias en la trastienda de las películas de la saga de James Bond que dirigió.
Al anunciar el proyecto en el verano de 2023, HBO afirmaba que Sam Mendes tenía “un toque hábil que sólo él puede aportar. Ha captado brillantemente el romanticismo y la realidad del cine actual”.