Cientos de pulpos muertos han aparecido esta mañana en la playa de Ereaga. No es algo del todo anormal ni tampoco la primera vez que ocurre cuando se dan circunstancias metereológicas similares a las de estos días. La cantidad de lluvia de los días precedentes a este domingo ha hecho que la baje la salinidad del agua de mar lo que provoca la muerte de los pulpos que no soportan el agua dulce.
Muy importante para todas las personas que se han encontrado en la playa con esta situación que sepan que no se pueden comer estos pulpos que son altamente tóxicos.
Se trata de un fenómeno natural bastante corriente en las costas gallegas y portuguesas.
En 2015, los servicios de limpieza municipal del Ayuntamiento de Getxo retiraron alrededor de 500 kilos de pulpos, que aparecieron muertos en la zona derecha de la playa de Ereaga.