Las quejas presentadas al Ararteko referidas a la educación aumentaron en 2023 un 136% respecto al año anterior, fundamentalmente por decisiones adoptadas en los procesos de admisión de alumnos en los centros educativos y para reclamar la libre elección de centro para los hijos.
El Ararteko ha publicado este miércoles su informe anual de actuaciones correspondiente al año pasado. Habitualmente este informe se entrega al Parlamento y se presenta públicamente, pero este año al haberse disuelto la Cámara solo se ha entregado en el Registro.
Una de las áreas más destacadas ha sido la educativa, donde el año pasado se presentaron 449 quejas frente a las 190 de 2022. La gran mayoría de estas quejas (315) hacen referencia a la admisión del alumnado en los centros educativos.
Medidas contra la segregación
El aumento tan importante de estas quejas se debe a que este curso se han puesto en marcha las medidas aprobadas para favorecer la equidad y luchar contra la segregación del alumnado más vulnerable.
Aula de un colegio.
En el informe, la Defensoría del Pueblo en Euskadi dice que esto, "como era de esperar", ha supuesto un incremento significativo de las quejas relacionadas con el proceso ordinario de admisión del alumnado para el curso 2023-2024.
Pero no solo ha sido esto lo que ha provocado este incremento de quejas, sino que la propia administración educativa se ha visto "superada" por el incremento "exponencial" de los recursos de alzada que presentaron las familias que no estaban de acuerdo con las decisiones de asignación de centros "que no eran objeto de su preferencia".
A juicio del Ararteko, esta situación hace notar una "cierta falta de previsión" por parte del Departamento de Educación respecto de las implicaciones que la tramitación de estos recursos podía llegar a tener en la escolarización en plazo del alumnado.
Fuera de plazo
"Las resoluciones tardías de estos recursos (interpuestos en el mes de mayo y resueltos, por ejemplo, en el mes de noviembre, estando el curso académico más que iniciado) se han dictado habiendo superado con creces el plazo de tres meses con que cuentan las administraciones públicas para resolver expresamente esta tipología de recursos, desde que se formulan", lamenta.
En el informe anual también se señala un incremento en las quejas referidas al proceso de escolarización del alumnado fuera del plazo ordinario de admisión.
A este respecto la intervención del Ararteko ha permitido, por ejemplo, que la administración educativa haya reconsiderado propuestas de escolarización en las que no se había tenido en cuenta el modelo lingüístico solicitado por las familias, haya accedido a autorizar cambios de centro en beneficio del alumnado y se haya logrado también el reagrupamiento de hermanos.
Imagen de la manifestación en Bilbao en defensa de la sanidad pública vasca.
Bajan las quejas en Osakidetza
Otra área con un importante volumen de quejas es la sanitaria, aunque después del importante aumento registrado en 2022 (un 220%) el año pasado disminuyeron de las 307 de ese año a las 260 de 2023.
En el conjunto de las quejas de esta área han ganado peso las relativas a la falta de personal sanitario en algunos centros de salud, especialmente médicos de familia y pediatras.
También se ha recibido un "número "significativo" de quejas relacionadas con el "excesivo plazo de asignación" de primeras consultas y consultas de seguimiento en atención especializada, así como de pruebas diagnósticas.
"Euskadi finaliza 2023 con la red de Atención Primaria y de segundo nivel tensionada y se percibe un aumento significativo de las relacionadas con la demora en algunos servicios de atención especializada y quirúrgica", recoge el informe
El Ararteko señala que se deben tomar las medidas de planificación y dotación presupuestarias necesarias para garantizar un sistema sanitario público "fundado en los principios de equidad, calidad y proximidad, con personal sanitario estable y dotado de medios suficientes".
Ambulatorio de Osakidetza en Bermeo.
A lo largo del año pasado el Ararteko llevó a cabo en total 13.602 actuaciones, una cifra ligeramente superior a la del año anterior, de las cuales 8.199 correspondieron a quejas y consultas, y 26 a expedientes de oficio.