La Real necesita hacerse fuerte en casa. El equipo realista está obligado a hacerse fuerte en su guarida porque será la manera más sencilla para que el nuevo proyecto adquiera seguridad, confianza y fiabilidad. Con un estadio nuevo cuyo ambiente no admite ninguna comparación con el de la pista de atletismo, con un equipo con una clara vocación ofensiva y con un plantel plagado de futbolistas de mucha calidad, no se pueden entender los números que acumulan los de Imanol en Donostia en este 2024.
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- Real Sociedad Fútbol (@RealSociedad) August 27, 2024
Si no llega a ser por su extraordinario rendimiento a domicilio, el sueño europeo de la pasada campaña se hubiera desvanecido. De momento, un encuentro y una derrota. Y frente a un rival en teoría inferior como los vallecanos.
Esta vez llega el Alavés, un conjunto con una propuesta muy distinta a la franjirroja y en un ambiente de derbi regional algo deslucido por el hecho de jugarse entre semana a pesar de ser el mes de agosto.
Una Real en construcción
La Real sigue en construcción, algo complicado de entender cuando va a afrontar la tercera jornada del campeonato. Y en algunas cuestiones, como la del delantero centro, casi indefendible que no haya llegado ningún refuerzo después de lo sucedido el curso pasado. También se espera de forma cada vez más ansiosa la llegada de un central que será Mats Hummels cuya contratación sí que ha despertado mucha expectación como es lógico dada la entidad de todo un campeón del mundo.
Defensa
En la etapa 3, Imanol anda muy justo en el eje de la zaga. Zubeldia sale de lesión; Pacheco se torció la rodilla en Cornellá pero no quiere oír nada de perder su plaza; y Jon Martín, que es la gran esperanza de futuro al haberse convertido en una de las grandes perlas de Zubieta, pero que solo ha jugado unos minutos en el primer equipo en su estreno en el Villamarín.
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Traoré y Javi López, que se enfrenta a sus ex, ocuparían las bandas sin que resulte descabellado que entre Aranburu para ayudar a apuntalar la novedosa zaga. En el centro del campo, el emperador Zubimendi ya es intocable para lo que resta de temporada, con Turrientes y Brais por delante, aunque se puede descartar que entre Sucic o incluso Sergio Gómez por alguno de ellos. Arriba, Kubo y Becker o el propio Sergio Gómez, con Oyarzabal en punta. No parece muy probable que se decida por Sadiq, sobre todo en casa donde podría formarse un inconveniente referéndum en la grada...
El rival
El Alavés también se encuentra aún en construcción, como lo confirma que este martes fichó a dos jugadores: un central, Mouriño, y un delantero, Toni Martínez. Por el momento, una derrota en Vigo y un meritorio empate ante el Betis en casa. El equipo babazorro sigue siendo competitivo y plantará batalla. El año pasado se llevó un empate con uno más de Anoeta.