Por fin se ve la luz al final del túnel, así se refería Jesús Avilés, médico de urgencias del Hospital de Donostia y delegado del Sindicato Médico de Euskadi, en Gipuzkoako Kale Nagusia a la situación que se vive, en estos momentos en el Hospital de Donostia.
Después de una 4 ola muy dura y que, en palabras de Avilés, no se ha sufrido con la misma intensidad en ninguna otra comunidad autónoma, gracias a las vacunas los contagios se han reducido bastante, provocando, al fin que se deshabiliten las UCIs extra dedicadas a la atención de pacientes graves. Avilés, subrayaba en GKN que en estos momentos los mayores contagios suceden entre personas jóvenes que pasan la enfermedad de forma más leve, lo que reduce la ocupación, también en planta. En tan solo un mes, por ejemplo, se ha pasado de atender a 50 pacientes diarios a atender a 5 o 10.
Esto son buenas noticias, aunque imágenes como la de los botellones de los fines de semana entristecen a cualquiera, así lo confesaba el delegado sindical que reprobaba este comportamiento e invitaba al trabajo colectivo.