La nueva ubicación ocupa una superficie de 600 m2, multiplicando el espacio de la antigua en casi un 400%. Se ha adaptado a la situación de pandemia de la COVID-19, y cuenta con dos circuitos separados. Además, según destaca Osakidetza, "todos los boxes son "polivalentes y multifuncionales, con capacidad de adaptación a la demanda existente en cada momento".
Se trata de una inauguración muy esperada ya que el nuevo edificio de Txagorritxu comenzó a levantarse a finales de 2017 y las obras han sufrido retrasos motivados, entre otras cuestiones, por la pandemia.
Durante las próximas semanas, otros servicios se trasladarán paulatinamente al nuevo edificio, y dejarán sus habituales espacios en el antiguo edificio: la unidad de ginecología, neonatal, las UCI y los quirófanos. Un traslado que Osakidetza prevé que termine el próximo mes de abril.
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Las urgencias pediátricas se trasladan este lunes al nuevo edificio de Txagorritxu
Osakidetza destaca que supondrá una mejora tanto para "la atención a pacientes y familiares, como para el trabajo del personal"