Layhoon Chan, el regreso de la presidenta

Una mujer «reservada», «muy inteligente», «implacable», «dura negociadora», «calculadora»... Son varios de los calificativos que rodean a la figura de Layhoon Chan, que cinco años después vuelve a asumir la presidencia del Valencia, rival que cayó ayer ante el Athletic en San Mamés. Es un nuevo golpe de autoridad que da Peter Lim, el mandamás de la entidad che, que vuelve a confiar en su paisana para asumir todo el poder en la gestión diaria del club, máximo cargo representativo vacante desde la destitución de su predecesor, Anil Murthy, el pasado 30 de mayo. La presentación el jueves de uno de los nuevos patrocinadores, Herrero Brigantina como Insurance Broker, sirvió para que la dirigente singapurensa ya apareciese de nuevo en primer plano, como en la primera época como presidenta, entre 2014 y 2017. Una puesta en escena en la que el club de Mestalla quiso proyectar una imagen de unidad y de proximidad con el entorno del club. Será, sin más, la responsable de la gestión general y dirección estratégica del Valencia. La dama de hierro.

Cuando recaló en la capital del Turia en 2014, la mano derecha de Peter Lim era una auténtica desconocida. Layhoon Chan es experta en el mundo financiero, donde goza de un enorme respeto y sus primeros pasos profesionales los dio como auditora en Inglaterra, antes de dar el salto a los despachos de grandes multinacionales y entrar en el mundo del fútbol de la mano del magnate singapurense, que en esta nueva vuelta de tuerca también ha nombrado a su hijo Kiat como nuevo consejero. Decisión esta última que invita a deducir que el vástago de Peter Lim pueda convertirse en un futuro no muy lejano en el dueño del Valencia. Pang Liang Ong, quien tiene 25 años de experiencia en el sector bancario al ser director del Bank of America durante 15 años, y Wee Kiat Lim, consejero Ejecutivo de Thomson Medical Group Limited (entidad cotizada en la bolsa de Singapur), se suman a la nueva dirección de la entidad valencianista. Nombramientos que conllevan la dimisión de Joey Lim como consejero ejecutivo, junto al ya ex director general Sean Bai y expresidente de la Fundación Teo Swee Wei.

La ejecutiva singapurense ya ejerce en el Valencia, donde asume que debe apretar los dientes tanto en la vertiente deportiva como en la financiera. No en vano, ya ha presidido la reunión de directores de departamento mensual y también se ha citado con los agentes de Hugo Guillamón para activar la renovación del contrato del futbolista guipuzcoano, que expira el próximo año y que al parecer ha sido sondeado por varios clubes, entre ellos el Athletic, al que visitó en San Mamés ayer.

Layhoon Chan deberá tomar las riendas desde septiembre de la espinosa negociación con el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat Valenciana para tratar de desbloquear la negociación por el nuevo estadio, con las obras paradas desde hace ya más de trece años, concretamente desde febrero de 2009. Sencillamente, le toca negociar duro y convencer a las autoridades para encauzar de nuevo el proyecto urbanístico, clave, en su opinión, para sanear las arcas de un Valencia que presenta unas pérdidas de 50 millones de euros y que necesita de un impulso, junto a recuperar la empatía de una masa social que confía en que su dama de hierro lidere un proceso de regeneración institucional y deportiva. Layhoon Chan, la presidenta, ha vuelto.