De todas las bacterias con las que puede llegar a coincidir el ser humano, quizás una de las más engorrosas sea la legionella. Esta bacteria de origen ambiental está presente de forma natural en el agua, aunque en concentraciones muy bajas. Sin embargo, ciertas circunstancias pueden llevar a que su presencia aumente, provocando un riesgo para nuestra salud, ya que la legionella puede producir enfermedades graves como la legionelosis.

En Onda Vasca con Txema Gutiérrez hemos contado una vez más con Insec, empresa dedicada al control de plagas y la sanidad ambiental, para conocer de primera mano cómo se combate la legionella. Roberto González, responsable del Departamento de Legionella de Insec, nos ha explicado que su trabajo comienza por evaluar los puntos críticos del circuito de agua para detectar posibles zonas estancadas. Es ahí donde pueden darse esas circunstancias, como pérdida de cloración y aumento de las temperaturas, que favorecen la proliferación de legionella. Una vez detectadas las zonas críticas, hay distintas opciones de tratamiento que permiten acabar con la bacteria en un plazo de pocas horas.