Años después de que arrancaran los trabajos en auzolan para desenterrar los tesoros arqueológicos ocultos en la isla de Garraitz de Lekeitio, el Ayuntamiento emprenderá en breve la puesta en valor del islote, conocido también como San Nicolás. Designado como parque arqueológico por el Gobierno vasco en 2019, lo que reforzó el carácter patrimonial y el grado de conservación de Garraitz, los trabajos empezarán por la estabilización de su área religiosa y militar. Será la primera de las acometidas que se llevarán a cabo y el objetivo pasa porque la zona sea rehabilitada para 2025, cuando la villa costera celebrará el 700 aniversario de su fundación como villa.
Según ha dado a conocer la administración local mediante una nota, los trabajos para desenterrar los tesoros de Garraitz tendrán un coste de 47.500 euros. Y serán llevado a cabo por la empresa Harri, construcciones y mampostería SL, siempre bajo la dirección de la sociedad de ciencias Aranzadi, que desde el primer momento ha dirigido las labores de voluntariado veraniegas organizadas por la asociación cultural local Atabaka. “El control arqueológico”, que será más intenso que lo realizando hasta la actualidad, “recaerá en Aranzadi”, según estimaron. Y ya se conoce por dónde empezarán. Será por su zona religiosa y militar. Analizarán “el cuartel, el almacén de pólvora y el fuerte de arriba” en este acometida inicial. No obstante, “en este proyecto se dividen las dos zonas de la isla de Garraitz”, que serán minuciosamente analizadas. “En estas labores han sido fundamentales las ayudas logradas desde el departamento de Promoción Económica de la Diputación Foral de Bizkaia y las consejerías de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente y de Cultura y Política Lingüística del Gobierno vasco”, según han señalado.
Garraitz ha ido desenterrando sus tesoros durante los últimos años. Así fue en el caso de una de las monedas descubiertas allí en el año 2019, de origen belga y del siglo XIV, datada entre los años 1355 y 1383, según los resultados de los análisis realizados por el departamento de numismática de Aranzadi. Según indicaron desde Atabaka, en el yacimiento excavado se hallaron “varias monedas de distintas procedencias como Escocia, Portugal o Castilla y de diferentes épocas. Y entre todas ellas destacó una pieza “datada entre 1355 y 1383 del Ducado de Brabante, en la actual Bélgica”.
La isla lekeitiarra, que está unida a la playa de Isuntza con un malecón, fue declarada ese mismo año 2019 como parque arqueológico por el Gobierno vasco. Fue poco antes de que responsables del Ejecutivo de Lakua, con el consejero Bingen Zupiria a la cabeza, y miembros del Área de Cultura de la Diputación Foral de Bizkaia, con la diputada Lorea Bilbao y el director de Cultura, Andoni Iturbe, entre ellos, visitaron Garraitz pocos meses antes.
Visitable tan solo en marea baja, en la isla confluyen yacimientos que van desde la Edad Media al periodo moderno, entre los siglos XIV al XIX. “No se puede descartar que en un futuro se hallen restos de la época romana”, como los encontrados en las inmediaciones el casco histórico de Lekeitio, señalaron fuentes municipales en esos momentos.
Botánica
Durante los últimos años también se han ejecutado labores para la preservación de la botánica que guarda el islote de Garraitz, de tan solo 6,5 hectáreas de extensión pero que ha acogido múltiples usos durante su prolija historia como ermita y convento, fortificación defensivas de distintas cronologías, polvorines, hornos caleros e incluso, como lazareto para aislar a personas enfermas de lepra o peste.