El joven saharaui debía ser deportado hasta Marruecos a primera hora de esta tarde pero el comandante del vuelo no ha querido viajar con él a bordo. El piloto de la compañía Air Arabia que tenía como destino Tánger se ha negado a trasladar al saharaui de 23 años de vuelta a su país de origen. Por lo tanto, el joven ha vuelto a la zona del aeropuerto de Loiu donde lleva ya 13 días, a expensas de ser ubicado en otro vuelo.
Una docena de personas se ha concentrado a las puertas de la terminal de salidas, para tratar de frenar la deportación del joven de 23 años que llegaba hace unos días pidiendo asilo político. Estas personas han intentado comprar billetes para volar en el mismo avión que el deportado pero se les ha denegado la compra.
A través de las redes sociales se hacía un llamamiento a la ciudadanía para intentar frenar la deportación del joven saharaui retenido en el aeropuerto de Loiu. El joven llegaba a Bilbao pidiendo asilo político hace trece días, al denegárselo y rechazar la Audiencia Nacional el recurso presentado por Zehar Errefuxiatuekin, el joven se declaraba en huelga de hambre. En la noche de ayer tuvo que ser trasladado al hospital por una emergencia aunque tras una revisión fue devuelto al aeropuerto, como ha explicado la Policía Nacional.
Por su parte, la subdelegación del Gobierno de Bizkaia argumenta que "las competencias de entrada y salida del territorio corresponden a la Policía Nacional", eludiendo cualquier responsabilidad sobre la repatriación del joven saharaui.
Las malas noticias para este joven de 23 años llegaron el jueves por la tarde, cuando la Audiencia Nacional rechazó la medida cautelar solicitada por Zehar Errefuxiatuekin en un recurso destinado a evitar la deportación a Marruecos del joven saharaui, cuya petición de asilo político ha sido denegada. Esto ha resultado con el intento de repatriación que se ha visto truncado por la negativa del piloto. El joven seguirá en la zona internacional del aeropuerto de Loiu hasta que sea reubicado en otro vuelo.