A punto de llegar el frío, son muchos los vitorianos que tienen una cita apuntada en la agenda para estas semanas: llamar a los de la caldera.
Son fechas de mucho trabajo para los técnicos que revisan las calderas de gas en la capital alavesa. En muchos hogares, sobre todo donde hay familias con niños pequeños, han empezado ya a poner la calefacción algunas horas la semana pasada.
Por eso, la visita de estos profesionales que ayudan al mantenimiento de las calderas, el circuito y los radiadores es inevitable entre los meses de septiembre y octubre.
Una revisión, que no hay que olvidar que es obligatoria por ley, con la que se garantiza que las calderas funcionen de manera correcta cuando más las necesitamos en casa, en invierno.
Además de mejorar el funcionamiento de la calefacción evitando averías en invierno, con este trámite se prolonga la vida útil de las calderas.