Cuando un electrodoméstico de uso diario se estropea en casa, como puede ser la cafetera, el microondas o la lavadora, no tardamos ni dos segundos en buscar en el móvil dónde podemos comprar uno nuevo lo antes posible y 'olvidarnos cuanto antes del viejo', que va a la basura.
Sin embargo, antes de tirar un electrodoméstico que ha dejado de funcionar, no significa que haya que buscar un sustituto inmediatamente.
De hecho, son muchos los vitorianos que creen en las segundas oportunidades, en intentar reparar antes de tirar.
Desde móviles hasta planchas, exprimidores, tostadoras, secadores, un libro electrónico o un reloj de cocina... Hay una larga lista de pequeños electrodomésticos o aparatos electrónicos que ya no funcionan porque se estropean en el día a día pero que pueden intentar arreglarse.
Sin embargo, no todos contamos con las habilidades necesarias. Por eso, en Vitoria está a punto de ponerse en marcha el primer Repair Café en Falerina.
¿En qué consiste un Repair Café?
Se trata de encuentros o talleres abiertos y gratuitos enfocados a la reparación de objetos que hay que intentar salvar de la basura mientras te tomas un café.
El objetivo es promover la reutilización y la reducción de desechos, sin olvidar el intercambio de conocimientos para fomentar un consumo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Eso sí, hay que tener en cuenta que estas sesiones están dirigidas a compartir conocimiento y colaborar, es decir, que no se trata de un servicio de reparación.
Son talleres donde todas las personas participan en el proceso, desde los voluntarios y manitas hasta los ciudadanos que llevan sus electrodomésticos estropeados.
Será el próximo 6 de junio cuando se inaugurará el proyecto de Repair Café en Falerina (en la calle Fray Zacarías Martínez, 2), una actividad que se llevará a cabo todos los martes de 19.00 a 21.00 horas.
Es es una iniciativa que nació en 2009 en Ámsterdam, y desde entonces se ha ido extendiendo por todo el mundo con un gran éxito. Y hay cafeterías que brindan su espacio para acoger estos talleres, como es el caso de Falerina en Vitoria.
Lo que se intenta es alargar la vida útil de los productos con ayuda de voluntarios que ayudan con sus conocimientos para reducir lo máximo posible los desechos electrónicos.
Hay que tener en cuenta que los encuentros son gratuitos y coordinados por personas voluntarias y expertas en reparación.
Y sobre todo que son las personas participantes quienes realizan las reparaciones, eso sí, con la ayuda de los voluntarios.