Eslovaquia ha entregado ya a Ucrania cuatro de los trece cazas supersónicos MIG-29 de fabricación soviética modernizados que le ha donado para ayudarle a defenderse de la invasión rusa, informó hoy el Ministerio de Defensa.
Los cuatro aparatos "fueron pilotados por personal ucraniano, con ayuda de las Fuerzas Aéreas eslovacas y otros cuerpos del ejército, que facilitaron la seguridad y la documentación necesaria", precisó el ministerio.
El resto de los aparatos será entregado a Ucrania "en el curso de las próximas semanas", añadió el departamento que encabeza Jaroslav Nad.
A cambio de esta flotilla de cazas supersónicos, que Eslovaquia no puede utilizar ya que no dispone de una empresa de mantenimiento tras romper relaciones con una entidad rusa, la UE pagará a Bratislava 200 millones de euros del Fondo Europa para la Paz.
Washington también ha ofrecido a Bratislava una importante rebaja, de hasta un 60%, para la compra de 12 nuevos helicópteros de combate Bell AH-1z Viper.
Los eslovacos decidieron en la legislatura anterior sustituir su flotilla de cazas MIG 29 con la adquisición de 14 aviones F-16 del fabricante estadounidense Lockheed Martin, un pedido millonario que está sufriendo retrasos en la entrega y algo que también justifica la rebaja en los helicópteros, según analistas locales.
Bratislava y Kiev han formalizado esta entrega al amparo de un acuerdo intergubernamental, algo que el actual Ejecutivo en funciones del conservador Eduard Heger considera su prerrogativa, sin necesidad de obtener la ratificación del Parlamento.
La oposición socialdemócrata ha criticado esta maniobra del gabinete de coalición, que cayó en una moción de censura en diciembre pasado y gobierna el país interinamente hasta los comicios del 30 de septiembre.