Otro año más que no va a poder ser. En este 2021 tampoco va a haber procesión del Rosario de los Faroles ni kalejiras de blusas y neskas, pero si para algo ha servido la pandemia es para demostrar también que el sentimiento por la patrona de Vitoria es a prueba de covid, ya que éste sigue igual de fuerte o incluso más que antes de la irrupción del coronavirus.
Así, al menos, lo manifiestan los portavoces de la Cofradía de la Virgen Blanca y los blusas y neskas de la Comisión, dos colectivos que aunque honran en estas fechas a la patrona de forma muy diferente, ambos, por responsabilidad, se han visto en la obligación de volver a aplazar sus eventos más multitudinarios.
Cofradía de la Virgen Blanca - Ricardo Sáenz de Heredia