AYER levantaron un ring sobre el escenario del Arriaga. Quizá el segundo en su historia tras la representación de Urtain. Pero el de ayer era lila. Y su única compañía, un letrero formado por tubos de neón también lila que componían la palabra LOF.
Eva Guerrero ha creado y dirige un espectáculo de danza y humor que, sobre la parodia de un campeonato del mundo de lucha libre femenina, aborda temas como la precariedad, la competitividad o la sexualización cotidiana. Lo ha titulado LOF Ladies on Figth.
Suena una música que evoca a la banda zíngara de un circo o a la No Smoking Orchestra de Emir Kusturica. Y aparece María Urcelay vestida con un traje de terciopelo negro y una camisa muy blanca. Baja un micrófono colgado de un cable suspendido de lo alto. Igual que en las grandes veladas clásicas de lucha o boxeo. María lo agarra. Es la ring- announcer. Presenta el mundial femenino de lucha. Solo podrá quedar una peleadora.
Al subir por las escaleras que conducen al foyer del Arriaga, Nicanor Villar, que vio el estreno en el Teatro Barakaldo, comentaba que "es una función muy divertida, pero propone cuestiones que pueden provocar sensaciones y puntos de vista distintos entre el público". Nicanor busca su localidad en compañía de Aitana Olarza y Begoña y Maite González. El grupo saluda a Rubén González y la actriz Aiora Sedano.
La ring-anouncer presenta a las primeras competidoras. Una es la Pantera de Otxarkoaga, que se medirá a la borrokalari, que baila jotas y lanza irrintzis. Slasptick, danza, ritmo y la lucha libre americana de fondo. Pero, bajo ese maquillaje aparece la piel de nuestra sociedad.
Además de María Urcelay, dando carne y baile a las peleadoras, Garazi López de Armentia, Leire Otamendi, Helena Wilhelmsson y Estibaliz Villa. Tras las candilejas Iratxe Artaza, Ana Vega y Jemima Cano.
Entre el público, los actores holandeses, de gira por los escenarios de estos lares, Yaqien Bouhbaka y Thorn Vendrik. No se trata de los únicos profesionales de la interpretación en la platea: Jon Koldo Vázquez y Álex Antúnez. Ambos conocen la obra; confiesan que "vienen informados" y que saben "que merece mucho la pena".
Cruza el atrio con paso decidido la abogada y política Jone Goirizelaia, también apasionada de la danza y colaboradora de la Asociación Ballets de Olaeta. Leire Sáez, alumna de Eva Guerrero, asiste en compañia de Eider Zurriarain. La informática italiana Martina Barón acude al espectáculo con Ruth Muñoz.
El trío familiar formado por los jóvenes Andrea y Mikel López y su prima Laida Fernández se estrena en la danza. "Nunca hemos visto una obra de este tipo, venimos a ver qué tal", explican.
No se perdieron la función Loinaz Larredonda, Junne Jiménez e Iker Pomposo. Lo mismo que Esti Valiño, Andrea Martínez, Edurne Corral y Paula García. Las actrices y también autoras de la obra Winona and Grace, las bilbainas Ainhoa Artetxe y Graciela Dondiz, pasaron al patio de butacas junto a Kepa Martín y el pequeño Luka. Winona anda Grace se representará sobre las mismas tablas dentro de unos pocos días.
Desde uno de los palcos, el fotógrafo Enrique Moreno Esquibel cambiaba objetivos al cuerpo de su cámara para retratar las evoluciones de las actrices, que bailan, simulan tirarse del cabello, giran sobre la lona y hacen reír al respetable mientras le fuerzan a la reflexión. Esta última es la verdadera lucha.
Tras esta función única en el Arriaga, LOF ladies on Figth, que ha sido apoyada por el departamento de Cultura del Gobierno vasco, el Teatro Barakaldo, la residencia Juana Bizkarra del Área de Cultura de Getxo y Garaion Sorgingune, sigue su gira.
Cuando terminen, habrá ganado solo una de las peleadoras. Quizá la Pantera de Otxarkoaga.
La provocativa 'LOF Ladies on Figth', obra de la coreógrafa Eva Guerrero, se presentó ayer en función única en el Teatro Arriaga
La propuesta, que mezcla danza y humor para abordar temas candentes, despertó interés entre el público bilbaino