La posibilidad de la primera posición está ahí. El claro favorito es el Lattes Montpellier, pero su victoria agónica por tan solo un punto y casi sobre la bocina, abre un pequeño hueco a la esperanza. Lointek Gernika Bizkaia no es el mismo equipo de hace más de un mes. Las dos victorias importantes ante Embutidos Pajariel Bembibre y Cadi La Seu le han dado al equipo mucha confianza en el trabajo realizado hasta ahora. Más allá de los resultados positivos, las sensaciones cada vez son mejores. En defensa con muchas más consistencia y en ataque con ese ritmo frenético tan característico de Gernika. Las piezas poco a poco se van ensamblando. Lucas Fernández dispone de una rotación amplia y confía en esas rotaciones por lo que la fuerza del grupo es aún mayor.
El Lattes Montpellier jugó en Maloste sin una de sus jugadoras referenetes por enfermedad: Alisia Jenkins. La escolta promedia 10 puntos por partido en la liga francesa y es un pilar fundamental. Aunque casi todos los focos se los lleve la campeona del mundo Kyara Linskens, autora de 18 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias en Maloste, las galas tienen un bloque muy sólido. La ex gernikarra Ameryst Alston ya demostró en su vuelta su capacidad anotadora. Para el conjunto francés este será su último partido de la fase de grupos y se juegan el primer puesto por lo que saldrán con el cuchillo entre los dientes. En la liga gala están con un balance de cinco victorias y dos derrotas.
Las chicas de Lucas Fernández son conscientes de que para competir, es fundamental igualar el tono físico del Lattes Montpellier. Como todos los equipos franceses utilizan mucho el contacto y el uso de manos y es sabido que en Europa hay más permisividad respecto a estas situaciones. Por lo que superar esa barrera y ser agresivas será clave. A partir de ahí intentar controlar la producción en todas las facetas del juego de Linskens también será importante para el Lointek Gernika Bizkaia.