¿Qué destacaría de las actividades programadas?
-Todo lo programado es muy interesante; tenemos charlas, teatro, música y talleres. Todas estas actividades enfocadas a trabajar el empoderamiento y la autonomía de las mujeres, así como la sensibilización de la ciudadanía. Pero por destacar alguna de las actividades, la manifestación que se organiza el mismo día 25 de noviembre en colaboración con la asociación de mujeres Gure Izarrak, el grupo feminista Azeri Gorriak y la asociación de mujeres migrantes de Berriz, ya que en la misma participamos ciudadanas y ciudadanos de todas las edades.
¿Qué les diría a los vecinos para que se animen a tomar parte en este tipo de reivindicaciones?
–Como ya sabemos la violencia machista es una lacra que no podemos combatir sin la implicación de todas y todos, y por eso trabajamos para que todas las mujeres puedan sentirse libres y disfrutar de las mismas oportunidades.
¿En qué ámbitos hay que trabajar para reducir la violencia hacia las mujeres?
–Son múltiples las violencias que sufren las mujeres, por lo tanto, es una cuestión que hay que abordar de una manera multidisciplinar; desde todos los ámbitos y desde todas las áreas. Desarrollar e implementar medidas y políticas enfocadas en acciones de educación y sensibilización, prevención, intervención, etc. Pero sobre todo, es fundamental cambiar la mirada y empezar a hablar y a responsabilizar a los agresores, tal y como demuestra la campaña lanzada por Emakunde.
¿Qué debería cambiar para que ya no sea necesario celebrar el Día Internacional contra la Violencia Hacia las Mujeres?
–Debería de cambiar la estructura de desigualdad que sostiene la violencia machista. Para lograrlo es fundamental la educación y la sensibilización en igualdad de mujeres y hombres. La clave está en llegar a la igualdad trabajando las políticas públicas de igualdad, creando planes de acción dedicados a prevenir y abordar la violencia contra las mujeres.
¿Un mensaje a la ciudadanía?
–Animar a participar en las actividades programadas para que ojalá llegue el día en que no tengamos que celebrar el Día Internacional para la eliminación de la Violencia contra las mujeres.