Tras la aprobación del Real Decreto Ley que modifica las condiciones laborales de las empleadas del hogar, sobre todo, en lo relativo al derecho a la prestación por desempleo y a la figura del desestimiento, que posibilitaba el despido sin causa, en Onda Vasca hemos buscado la valoración de las protagonistas.
Entrevistada en Onda Vasca, Lorea Ureta, de la Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkaia, ha explicado que "a partir de octubre, las trabajadoras de hogar van a poder comenzar a cotizar por el desempleo pero ya avisamos que hasta dentro de un año, ese derecho no va a ser realmente efectivo. Nosotras esperábamos algo más avanzado como que hubiera un periodo de transición en el que a las trabajadoras se les reconociera lo ya cotizado y empezar a cobrarlo desde ya. Pero no. Empiezan a cotizar desde cero".
Reconoce Ureta que esta nueva norma sí incluye beneficios como el reconocimiento a la prestación por desempleo y la desaparición de la figura del desestimiento, con lo que ahora el despedido de una trabajadora del hogar debe tener una justificación. Pero, añade Lorea Ureta, "esto también se queda a medio camino porque la indemnización sigue siendo más barata que en el Estatuto de los Trabajadores". Aclara que "se queda en los 12 días por año en lugar de los 20 que marca el Estatuto de los Trabajadores".
En cuanto a los puntos positivos de la nueva norma, Lorea Ureta destaca que las trabajadoras del hogar dejan de estar excluídas de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y la cotización a Fogasa, que les cubre en caso de impago de salarios.
Por todo ello, la valoración global que hace Ureta es "un sabor agridulce. Esperábamos más. Se ha quedado cojo".
Según datos de agosto de 2022, en la CAV había 27.490 trabajadoras de hogar dadas de alta en la Seguridad Social, a las que habría que las mujeres que trabajan en el sector sin papeles