donostia –Bajo el lema Más accidentes de trabajo no. La precariedad mata, los sindicatos ELA, LAB, Steilas, EHNE, ESK e Hiru se concentraron ayer ante la sede del Gobierno Vasco en Donostia contra la siniestralidad laboral para exigir a las administraciones que pongan este problema "en el centro de su agenda política". "La sangría no cesa", lamentó durante la movilización la representante de LAB Gema Bouza, quien denunció que en los últimos seis días tres trabajadores han fallecido en Gipuzkoa en accidentes laborales: uno en la empresa Almacenes Usabiaga de Urretxu atrapado por una carretilla, otro de Moyúa en Ormaiztegi y un tercero en la UTE Garbiketa de Donostia, a los que se suman los fallecimientos anteriores de trabajadores forestales "en una situación de precario absoluta". "Detrás de estos trabajadores hay familias, compañeros y responsables de todo esto que está pasando", destacó y recordó que "en Euskal Herria por los menos 39 trabajadores han fallecido este año".
La representante de LAB subrayó que los accidentes laborales "no son hechos aislados, sino el reflejo de un modelo productivo en el que prima la economía por encima de la salud y la vida de la clase trabajadora". "Ante esto, ¿qué está dispuesta a hacer la Administración para frenar esta situación y este modelo que mata?", se preguntó.
Aumento de la siniestralidad Según el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales (Osalan), un total de 21.520 trabajadores vascos sufrieron un accidente de trabajo que conllevó baja laboral en los siete primeros meses del año, lo que supone 3.397 accidentados más que en el periodo enero-julio del pasado año. Este incremento del 18,7% hasta julio de los siniestros (en jornada de trabajo, más los sucedidos en el camino de ida o regreso del trabajo, además de las recaídas) duplica la subida del 8,5% que se había registrado en el primer semestre.
Los accidentes en jornada entre enero y julio ascendieron a 18.566 (+19,3%) y los contabilizados in itinere a 2.040 (+14,7%). Por su parte, las recaídas que conllevaron baja fueron 914 (+16%). Del total de accidentes en jornada de trabajo, 18.461 fueron leves (+19,6%), 90 graves (-12,6%) y 15 mortales (misma cifra que en 2020). Los siniestros in itinere de carácter leve fueron 2.027 (+14,8%), hubo diez graves (por once en 2020) y tres fallecidos (uno más que un año antes).
El sector con más siniestros en jornada de trabajo fue Servicios (9.995 accidentes), seguido de la Industria (6.018 siniestros), Construcción (2.242 accidentados) y Agricultura, Ganadería y Pesca (311 bajas). Asimismo, el sector con mayor siniestralidad laboral fue la Construcción (39,8 bajas por cada mil ocupados), seguido de Industria (36,8 bajas), Primario (32,7 bajas por cada mil ocupados), y Servicios (14,4 bajas por cada mil trabajadores).
Por territorios, la siniestralidad creció un 23,5% en Araba, con 3.318 accidentes en jornada de trabajo; un 19,8% en Bizkaia, tras apuntar 9.458 siniestros, y un 16,4% en Gipuzkoa, al sumar 5.790 percances.
Los datos
Accidentes laborales. Un total de 21.520 trabajadores vascos sufrieron un accidente de trabajo que conllevó baja laboral en los siete primeros meses del año, lo que supone 3.397 accidentados más que en el periodo enero-julio del pasado año, lo que supone un aumento del 18,7%.
Fallecidos
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Un total de tres trabajadores han fallecido en seis días en Gipuzkoa: Uno en la empresa Usabiaga de Urretxu atrapado por una carretilla, otro en Moyúa en Ormaiztegi y un tercero en la UTE Garbiketa de Donostia.