Los carburantes más consumidos despiden abril con bajadas del 10 % respecto a marzo gracias al descuento de 20 céntimos por litro exigido por el Gobierno español desde el comienzo del mes para tratar de reducir el gasto que suponen para los consumidores y, por ende, contener la inflación.
Según el Geoportal del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que reúne los datos de 11.646 surtidores de la red estatal, los precios para ambos carburantes se hubieran situado este sábado por encima de los 1,8 euros por litro (/L), de no haber sido por los descuentos efectuados.
En ese caso, la gasolina de 95 octanos se pagaría en torno a 1,82 /L de media. Con la bonificación mínima de 20 céntimos por litro se queda en 1,62 /L.
Mientras, el litro de combustible diésel se pagaría a 1,85 /L, el precio más elevado de su historia, aunque con el descuento no sobrepasa los 1,7 /L.
Aunque con la subvención se la logrado controlar de momento la escalada en los precios de los combustibles, lo cierto es que el litro de gasolina es ahora un 8,54 % más caro que al inicio de 2022, cuando su valor medio en las gasolineras era de 1,479 /L.
Por su parte, el gasóleo presenta un sobrecoste del 18,21 %, frente a los 1,347 /L que costaba en las primeras jornadas de enero, siempre según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).
En cambio, con respecto a hace un año, el litro de gasolina es ahora un 18,4 %, más caro que entonces (1,326 /L) y el de gasóleo, un 30,4 % superior (1,183 /L).
Rellenar un depósito medio con 55 litros de gasóleo tiene ahora un coste de 93,5 euros, mientras que si el repostaje se hiciese en un tanque de gasolina, costaría 83,37 euros. Ello supone un gasto de 28 euros y 16,44 euros más que hace un año, respectivamente.
LA SUBVENCIÓN AYUDA A MODERAR LA INFLACIÓN
La contención de la subida de los carburantes gracias a la subvención pública -junto a la bajada de la electricidad- ha ayudado también a moderar el avance de la inflación en el cuarto mes de 2022, que se ha colocado en el 8,4 % interaual, 1,4 puntos porcentuales por debajo de la tasa registrada en marzo (9,8 %), según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Según los cálculos del Gobierno, los descuentos de 20 céntimos por litro a la hora de pagar cada repostaje de carburante supondrán un desembolso de aproximadamente 1.423 millones de euros para las arcas públicas.
Aunque ya lleva un mes aplicándose, la bonificación fue aprobada este jueves por el Congreso de los Diputados, al formar parte del paquete de medidas anticrisis que el Gobierno diseñó como respuesta a los efectos de la guerra en Ucrania sobre la economía española.
La Agencia Tributaria confirmó este jueves que no concederá más anticipos a las gasolineras por los descuentos, que estarán vigentes hasta el próximo 30 de junio, pese a las reclamaciones de los establecimientos que aducen problemas de liquidez.
Según el organismo adscrito al Ministerio de Hacienda, ya se ha concedido un anticipo en abril, por un importe total próximo a los 300 millones de euros.
Sin embargo, la patronal principal del sector gasolinero (Ceees, que representa los intereses de unas 4.000 estaciones de servicio) ha denunciado que los problemas de liquidez en el sector se están extendiendo, especialmente entre las pymes.
GRANDES PETROLERAS EFECTÚAN DESCUENTOS MAYORES
Las grandes empresas del sector, como Repsol o Cepsa, están complementando los descuentos de los carburantes con rebajas adicionales para los usuarios de sus aplicaciones móviles.
En el caso de Repsol, estos descuentos pueden llegar a suponer hasta 30 céntimos por litro para aquellos que reposten y estén registrados en la plataforma digital de la compañía.
El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, consideró el jueves que el coste del descuento de los carburantes constituye más bien una inversión para la petrolera. "(El descuento) ha permitido avanzar de forma muy importante en la digitalización de la compañía y aumentar las ventas", reconoció Imaz.
Además, señaló que no conocía si los descuentos aplicados por Repsol continuarían siendo los mismos después del 30 de junio, cuando finaliza el período de bonificaciones de la administración.