La nostalgia invadió el Edificio Ensanche de Bilbao, donde los ciclistas vizcainos ganadores de etapas del Tour de Francia fueron homenajeados por la Fundación Euskadi por sus éxitos y aprovechando la acogida de Bilbao de la Grand Départ. Para todos ellos, los protagonistas y el entorno, son días especiales, emotivos, porque la carrera ciclista más prestigiosa se acerca a los lugares donde nacieron y crecieron para convertirse en figuras icónicas.
“Va a ser una de las primeras etapas más grandes de la historia del Tour”, vaticinó Marino Lejarreta, estrella en la constelación que conforma junto a Joane Somarriba, Federico Ezquerra, Jesús Loroño, Aurelio González, Julián Gorospe, Fede Etxabe, David Etxebarria, Javier Otxoa, Roberto Laiseka, Iban Mayo y Omar Fraile, todos encumbrados en el Tour, la carrera de las carreras. “Nosotras corríamos el Tour más en soledad, sin aplausos, con poco público. En 2001 –año en el que ganó la Grande Boucle– salimos desde Bilbao y fue diferente, con toda la afición en la carretera. Fue único”, evocó sobre el Tour femenino Somarriba, la más laureada, que añade sobre lo que está por acontecer: “Es un evento gigante que esperamos nos haga emocionarnos mucho”.
En consonancia se manifestaron todos los galardonados por la Fundación Euskadi. “El Tour es muy importante para Bilbao, para Euskadi; es una gran repercusión. Mejor decisión para promocionar no va a haber. Es un gran trofeo. Que se dé a conocer en todo el mundo es una decisión muy acertada”, valoró Etxabe. “Euskal Herria siempre se ha volcado con el Tour. Son días para recordar en años, en Bilbao y en el mundo entero”, añadió Iban Mayo, uno de los últimos ganadores, uno de los elegidos, uno que consiguió “alinear planetas”, como bromeó Etxebarria, para alzarse vencedor de etapa. “Ganar es muy difícil, los astros tienen que estar a tu lado. El Tour es la carrera que mejor preparan los corredores”, dijo Laiseka.
Esta llegada del Tour reverdecerá, por ejemplo, la gloriosa etapa del Euskaltel-Euskadi. “Con este comienzo de Tour se da un paso importante para que vuelvan los mejores años”, aseguró Julián Gorospe, que ganó como corredor y también como director del equipo naranja, con Etxebarria, Laiseka y Mayo. La acogida del Tour es una invitación para poder recuperar el pasado.