Los comunes piden a PSC y ERC que no permitan la "maniobra trilera" de Borràs

El portavoz de Catalunya en Comú, Joan Mena, ha instado a PSC y ERC a "no permitir la maniobra trilera de Laura Borràs", que, pese a estar suspendida, quiere "mantenerse en el cargo" hasta que haya sentencia sobre su caso, lo que impide la designación de un sustituto en la presidencia del Parlament.

Así lo ha afirmado Mena en declaraciones a Efe, después de que la Mesa del Parlament apartara a finales de julio a Laura Borràs de sus funciones de presidenta del Parlament, al aplicar el artículo 25.4 del reglamento de la cámara catalana, que obliga a suspender a un diputado si le abren juicio oral por corrupción.

Pese a tener suspendidas sus funciones, Borràs se niega a dimitir de su cargo, lo que impide que pueda ser designado un sustituto en la presidencia del Parlament y obliga a delegar esas funciones provisionalmente en la vicepresidenta primera, Alba Vergés.

Según Mena, "Borràs está haciendo un daño irreparable a la institución del Parlament y si ella no es capaz de tomar la decisión de apartarse y dimitir como presidenta, los partidos que pueden impedir que continúe (PSC, ERC y CUP, que tienen representación en la Mesa) tienen que apartarla del cargo".

"No necesitamos una presidencia interina sino real y que tome decisiones porque desde que el Parlament está presidido por Borràs es noticia por muchas cosas, pero no por su trabajo legislativo, y esto desacredita a una cámara tan importante", ha denunciado.

"Una jugada de 'trilerismo' político"

Para Mena, "lo que hace Borràs es una jugada de 'trilerismo' político, intentando esconder su responsabilidad debajo de la mesa para no tener que dimitir".

"Lo que necesitamos en Catalunya es tener instituciones con la máxima dignidad posible y esto pasa por que la presidencia del Parlament sea la primera en cumplir su reglamento", ha remarcado.

Según el portavoz de los comunes, es necesario que los partidos que pueden apartar a Borràs "se pongan de acuerdo" y fuercen una votación para destituirla del cargo, a fin de poder elegir una nueva presidencia y "acabar con este culebrón que está desgastando el Parlament".