La guerra de Ucrania vista bajo un prisma infantil. Es lo que reflejan los nueve dibujos hechos por niños y niñas de entre 8 y 12 años, de pueblos cercanos a Chernóbil (Ucrania) y que reflejan las crudas experiencias vividas.
Las imágenes, facilitadas por la Asociación Chernóbil Elkartea, que lleva casi tres décadas trayendo a pequeños y pequeñas de la zona afectada por el desastre nuclear de 1986 a pasar el verano en la CAV y Navarra.
“Hace un año estábamos en shock”, afirmaron ayer desde la asociación, recordando el inicio de la guerra, que además tocó muy de cerca a las familias con las que tratan, ya que “la entrada de las tropas fue por Bielorrusia, tomando por el camino aldeas en las que residen nuestros niños y niñas”. Así pasaron “seis semanas sin siquiera contactar por teléfono” con sus personas allegadas.
En 2022, la asociación ha conseguido que 400 personas vinieran a la CAV y Navarra como refugiadas, al tiempo en que se han enviado “cientos de kilos de ayuda humanitaria”, como ropa o medicinas. “Vuestro sufrimiento es nuestro sufrimiento y seguiremos haciendo lo posible por ayudaros”, clamaron, al tiempo que lanzaban un “llamamiento a la paz”.