José Manuel Araña Iriarte, de 58 años, es un ganadero de Arbizu que lleva toda su vida en este sector. "Más de tres décadas", recuerda. Junto a su pareja dirige una sociedad con unas 400 ovejas latxas. El incremento de los costes de producción y la sequía entre mayo y noviembre ha "hundido" a granjas, confiesa en la sede del sindicato EHNE, en Pamplona.
Comparten este comentario Lorenzo Sarratea, Josu Joraruia y Patxi Zalba, todos ellos ganaderos como él. "Las ovejas están más flacas que nunca debido a la falta de lluvia", manifiesta José Manuel. Estos profesionales recolectan forraje para acopiar y poder suministrar en los meses de invierno a sus rebaños. Sin embargo, este año ha recogido "menos de la mitad que la campaña pasada" y ha tenido que dar de comer este alimento antes de tiempo por lo que actualmente "el almacén se encuentra medio vacío", ha contado.
La falta de agua
Josu Joraruia, de 38 años, de Donamaria, añade en relación al uso de este forraje que "el invierno se adelantó al verano" porque sus 400 ovejas no podían alimentarse en las praderas, y debía darles de comer dentro de las explotaciones. "Las personas mayores de los pueblos indican que no recuerdan una sequía como la de 2022", manifiesta Patxi Zalba, pastor de 56 años y con 500 ovejas a su cargo en Viscarret (Valle de Erro).
"Nunca había vivido una sequía en primavera", agrega José Manuel. "Hemos sufrido ausencia de precipitaciones entre julio y septiembre, pero no tan prolongada como la actual", insiste Lorenzo Sarratea, de 53 años y presidente de la DO Roncal, y con un rebaño de 240 ovejas.
Así, Josu reitera que ni él ni sus padres habían padecido esta escasez de agua. Su rostro representa el relevo generacional en casa y recuerda que compañeros de profesión más jóvenes, que se han incorporado recientemente, se encuentran en una situación complicada.
“ El calor y sequía van a disminuir la producción de leche, y puede que haya menos ovejas preñadas ”
Estos cuatro ganaderos han asistido a la rueda de prensa convocada por EHNE para exigir a las empresas elaboradoras que operan en las DO Idiazabal y DO Roncal que incrementen los precios que abonan a los pastores. El sindicato pide un incremento de entre el 30% y 40%, pero las subidas que están planteando las compañías oscilan entre el 15% y 18%.
El futuro de los jóvenes
Lorenzo Sarratea ha echado en falta a ganaderos jóvenes en la rueda de prensa porque de "ellos es el futuro". Sin embargo Patxi Zalba ha reflejado una realidad: "¡Pero tú crees que tienen ganas de venir! Están desesperados porque han hecho planes de mejora en sus instalaciones, y los presupuestos iniciales se han disparado".
José Manuel Araña, Lorenzo Sarratea, Patxiku Irisarri, Fermín Gorraiz, Josu Joraruia y Patxi Zalba, en la sede del sindicato.
Lorenzo ha profundizado en este tema: "Cuesta conservar el relevo generacional, y actualmente los jóvenes que han invertido se encuentran ahogados por lo que deben tener un apoyo". El presidente de la DO Roncal ha repetido que una explotación no se puede cerrar de manera temporal como una industria. "Si se clausura, resulta muy complicado que posteriormente pueda reanudar la actividad", ha manifestado.
"Ha saltado por los aires"
El secretario general de EHNE, Patxiku Irisarri, ha recordado que aquellas personas jóvenes que se implantaron hace dos años disponían de un plan de viabilidad, que con el contexto actual "ha saltado por los aires". Por ese motivo, ha pedido al Gobierno de Navarra que se implique. "Hay jóvenes que apuestan por el ovino de leche, y resisten en el sector porque diversifican el negocio y también elaboran quesos", ha contado.
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Irisarri ha puntualizado que este sector cobró una media de 0,96 euros el litro de leche el año pasado. El 18% que propone la industria supone elevar el valor a 1,13 euros el litro; y la propuesta de EHNE supondría percibir 1,25 euros por litro si el aumento es de un 30%; y de 1,34 euros si se aplica la subida del 40%.
El presidente del sindicato, Fermín Gorraiz, ha pedido que los contratos entre empresas y ganaderos se firmen antes de la entrega de la leche producida, a finales de año; y que puedan revisarse en función de los aumentos de costes, como pienso o energía. "Los números son para echarse a temblar: el precio de los piensos ha crecido un 40%, y la energía, un 70%. Además la sequía ha obligado al ganadero a gastar "35,47 euros más por cada oveja", ha reiterado.
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Gorraiz también se ha detenido en el precio de la alfalfa, que el sector ovino y ganadero en general necesita más este año por la sequía, y se encuentra muy elevado. "El año pasado pagábamos 180 euros la tonelada de alfalfa; y ahora 350 euros", ha subrayado.