El Ayuntamiento de Donostia destina un 11% más de fondos a los gastos del departamento de Acción Social, según el borrador de cuentas que ha sido presentado esta semana a los grupos políticos. En concreto, los gastos del departamento de Acción Social (sin contar con los de personal) ascienden a 20,2 millones de euros, dos millones más que el pasado año, es decir, un 11% más.
En total, el departamento en manos de la concejala del PNV Aitziber San Román dispondrá de 33,6 millones de euros, un 6,2% más que el pasado año, de los casi 462 millones contemplados en las cuentas que se aprobarán en marzo.
Según un reparto por áreas, la atención a las personas mayores se lleva un 46% de total del presupuesto del departamento, con 328 euros por mayor de 65 años. Le siguen los centros de servicios sociales, con un 27% del total. Después se sitúa la Inclusión Social, con un 27% del total, y 340 euros por persona en proceso de inserción y, finalmente, la protección a menores en riesgo de exclusión con un 10% del total y un gasto de 126 euros por persona.
Uno de los incrementos más llamativos dentro del reparto económico previsto es el del área de Inclusión Social, con 2,6 millones de euros en las cuentas (435.888 más que el pasado año), es decir, un 20% más.
En este capítulo se incluye el albergue Gaueko Aterpea, que ofrece atención nocturna a las personas sin hogar; el centro de atención diurna Hestia, de la calle San Bartolomé; los talleres de inserción social; el servicio municipal de urgencias sociales, y la gestión de las viviendas para personas en exclusión, entre otros conceptos.
El aumento de fondos se fundamenta en varios cambios previstos para este año como, por ejemplo, la contratación de un educador más para Hestia, la entrega de kits de higiene y alimentación a 40 personas por semana y el acceso a duchas para estas mismas personas.
También se ha incorporado una educadora más para atención y acompañamiento a las víctimas de violencia machista y otro educador más para pisos de acogida.
La ampliación de otros contratos dependientes del departamento de Acción Social y la implantación de un servicio de seguridad en el Servicio de Puertas Abiertas para personas sin hogar son otros cambios que conllevarán un mayor gasto en este apartando.
También dedicará más dinero el Consistorio al programa de Ayuda Domiciliaria, para el que fija 9,9 millones de euros este año, 818.885 más que los de 2022. La subida, de un 9%, sin embargo, no se corresponde con un mayor uso del programa, ya que el número de horas cumplidas ha ido bajando en los últimos tres años. Está motivado por los nuevos precios del servicio, que ha sido adjudicado recientemente a Aztertzen Servicios Asistenciales hasta el año 2026 con un convenio laboral renovado.
También crece un 8% la partida económica destinada al programa Goizaldiak para mayores que viven solos y un 11% la cantidad económica para gestionar apartamentos tutelados para personas de edad avanzada. Este año se pondrán en marcha los nuevos de la calle Arrasate, cuya obra ha finalizado recientemente.
Otras partidas que forman parte de los gastos de Acción Social se centran en la promoción de las personas mayores, con actividades de ocio como el programa Plus 55, la gestión del Topaleku de Aiete y los hogares del jubilado.
Mientras la mayoría de partidas de gasto suben, las inversiones previstas por el departamento bajan un 88% y se quedan en 2,2 millones de euros. En esta cantidad se incluye la remodelación del hogar del jubilado de la Parte Vieja, la ampliación del centro de servicios sociales de El Antiguo, la reforma de fachadas, tejados y baños de distintos hogares del jubilado y el equipamiento con cámaras de Villa Salia. La obra de reforma de edificio de Jai Alai destinado a acoger un centro de día para personas sin hogar, entre otros servicios, lleva varios meses parado. El Ayuntamiento ha suspendido el contrato con la constructora, por lo que se retrasará su apertura. l