Quizá usted no lo sepa pero, en cualquier aeropuerto, mantener el espacio aéreo libre de aves es una prioridad y una actuación de seguridad necesaria. No en vano, los campos de vuelo son áreas de alta sensibilidad, donde la presencia de aves puede suponer un riesgo para la seguridad de las operaciones aéreas, llegando a darse incidentes graves en caso de que estos animales colisiones con alguna aeronave o se metan en algún motor.
Para minimizar ese riesgo, se lleva a cabo una estrategia de control que se centra en la utilización de halcones. De ello hemos hablado en Onda Vasca con Txema Gutiérrez con Manu Reyes, miembro del servicio de control de fauna del aeródromo. Reyes, que se ha acercado hasta el set de Onda Vasca con Mertxe, uno de los halcones del servicio, explica: "A Mertxe la hemos criado desde que nació. Al haber volado siempre aquí, considera esto su territorio. Trabajamos durante las horas de luz. Revisamos las pistas y alrededores y, si hay aves que puedan interferir, volamos halcones para que se vayan. A lo largo del día volamos halcones en distintos puntos del aeropuerto y con eso creamos una zona hostil para el resto de aves".