Polideportivo

Los hermanos Milagros

Daniel ganó la medalla de plata en el Mundial de Patinaje, Paula juega en la élite del balonmano
Paula Milagros, jugadora del KH-7 Granollers, y Daniel Milagros, ganador de la medalla de plata en el mundial de patinaje.

Los hermanos Milagros, Daniel y Paula, abanderan el deporte navarro alrededor del mundo. Daniel ganó la medalla de plata en el mundial de patinaje disputado en Montecchio Maggiore (Italia), el 31 de agosto. Paula renovó con el KH-7 Granollers, jugará un año más en la máxima categoría del balonmano español y en competición europea.

Los dos empezaron con el deporte desde muy jóvenes, animados por su madre, Sonia Herce, que es profesora de Educación Física en el colegio Sagrado Corazón de Pamplona. Daniel empezó con el patinaje a los cuatro años. Y es curioso porque no fue el primero de la familia en practicar este deporte. “Empecé porque mi hermana lo hacía, pero ella tuvo que dejarlo”, afirmó. Su relación familiar “es buena” y actualmente se ve afectada por la distancia: Daniel estudia Ciencias del Deporte en Valencia, en su tercer año, y Paula vive en Granollers, donde compagina su trabajo con la más alta competición en el balonmano.

Las expectativas de Daniel antes del mundial no eran muy ambiciosas. “El objetivo era ganar experiencia y disfrutar. La verdad es que no tenía expectativas de resultados, para nada”. No se imaginaba lo que iba a conseguir cuando cogió ese vuelo hacia Madrid para reunirse con los demás atletas nacionales.

EL MUNDIAL

Como los seleccionados eran de diferentes partes del Estado, se reunieron todos en la capital. “De Madrid volamos a Venecia y allí alquilamos coches y fuimos hacia Vicenza, donde se disputaba el campeonato del mundo”, declaró Daniel. Una vez allí, los atletas españoles se prepararon para la competición. En su caso, debía mentalizarse para participar en distintas modalidades: “Yo compito en varias distancias: 200, 500, 100 metros y vuelta al circuito”. No todas las carreras fueron de medalla. En la de 200 metros quedó séptimo. En la de 500 consiguió la décima posición y en la de 100 no pudo pasar de ronda por unas molestias.

Esas molestias hicieron recordar a Daniel malos presagios. “Este año, en febrero, me rompí la clavícula y me lesioné en junio el abductor en el campeonato de España”. Es por este motivo que tuvo que preparar el mundial en dos meses. Todo ello posible con la ayuda de su entrenador, Eugenio Landete.

Pero ninguna lesión impidió que Daniel Milagros hiciera honor a su apellido en la modalidad de vuelta al circuito. Esa medalla de plata llegó de la forma más inesperada posible. “En la primera ronda, dieciseisavos de final, quedé en el puesto diecisiete. Pero revisaron la carrera de un chileno y lo eliminaron por falta técnica. Entonces yo pasé como último tiempo”, expicó. Luego, en cuartos, pasó de ronda por seis milésimas. In extremis. En semifinales, por si el nivel de epicidad no fuera suficiente, le tocó competir contra su compañero de selección. Y otra vez consiguió pasar de ronda. Una vez en la final “ya me vi con opciones, pero siempre es complicado porque compites con los mejores del mundo”, subrayó.

De esta forma Daniel Milagros se hizo con una medalla de plata, quedando por detrás de un italiano y por delante de un francés.

PAULA MILAGROS

En una familia de deportistas como esta, no puede faltar alguien que practique un deporte de equipo. Paula Milagros juega a balonmano en la máxima categoría, en la Liga Guerreras Iberdrola. “Empecé a jugar a los 14 años”, declaró. Se formó en la cantera del Loyola, en Pamplona. Los caminos de la vida le llevaron a Lérida, donde estudió Fisioterapia. Actualmente juega en el KH-7 Granollers, en la posición de pivote y en la categoría más alta del balonmano español.

Paula tiene que compaginar su trabajo con los entrenamientos. “Es complicado porque entrenamos cada día. Trabajo por las tardes después de entrenar”, subrayó. Sin embargo, reconoció que el club le facilita poder compaginar el deporte con la vida laboral. A veces es complicado porque, al estar en un equipo de élite, juega la competición europea y “este año tendré que compaginar el trabajo con viajes por europa. Podré tener que trabajar un día y al siguiente viajar a Rumanía para la competición europea”, confesó. Cada dos semanas tienen que viajar alrededor de España para disputar los partidos fuera de casa.

Esta forma de vivir la aprendió de su madre: “Nos inculcó, a mi hermano y a mí, la importancia del deporte. Nos enseñó a disfrutar de él y a tener disciplina”. También les animó a seguir con los estudios y no dejarlos de lado.

Cuando su hermano estaba disputando el mundial en Italia, Paula se encontraba en el gimnasio haciendo pesas, recuperándose de un problema en el hombro. En ese momento le llegó un mensaje en el móvil: “Dani se ha metido en la final”. Paula se sintió “la hermana más orgullosa del mundo”, confesó alegremente. Luego, cuando vio que había conseguido la medalla de plata, no se lo podía creer. “Daniel es un ejemplo para cualquier niño, tiene mucha disciplina y le encanta lo que hace”, finalizó.

La familia milagros se mueve entre campeonatos del mundo de patinaje, competiciones europeas de balonmano, estudios y trabajo. Todo ello posible gracias al esfuerzo, la ambición y el amor de una madre por el deporte que supo inculcarlo a sus hijos. Y de esta forma, con epicidad y dificultades, dos navarros de apellido Milagros recorren europa en busca de aventuras, deporte y diversión.

20/09/2023