La calle Los Herrán estrenará el próximo año su renovado aspecto una vez que finalicen las obras para convertir esta transitada arteria en un moderno corredor verde.
Nada va a tener que ver el actual reparto de espacios con el que se va a implantar al conceder toda la relevancia al peatón, en detrimento del vehículo privado y la circulación. Las zonas verdes, superficies ajardinadas y áreas de juego para los más pequeños se adueñarán de la calle.
Todo ello será una realidad en 2023 como culminación e un proceso que tiene fijada en la "segunda quincena de octubre" la fecha en la que saldrá a licitación el proyecto, según ha avanzado el alcalde, Gorka Urtaran, en la primera sesión del debate de Política General, que ha comenzado esta mañana en el Ayuntamiento.
La financiación ya cuenta con 10 millones de euros asignados, y se está a la espera de la resolución de los fondos europeos para conocer si llega de las arcas comunitarias más aportación.
Transformación profunda de la calle
La actuación prevista para transformar Los Herrán se basa en agrupar las calzadas de circulación en el lado este, desplazando la circulación de Los Herrán al lado de José Mardones. De esta manera, se libera para uso peatonal una gran superficie ahora asfaltada. En este punto surgiría una senda verde urbana, un gran bulevar verde de medio kilómetro.
La intervención se acompaña de nuevos bidegorris en ambos sentidos, un eje hortícola y de ocio (incluido un parque con juegos naturalizados), un lago como estanque de agua de lluvia, el reverdecimiento de la zona deportiva existente junto al Instituto Los Herrán y un nuevo uso para la antigua estación de autobuses.
Y es que una vez reubicados los actuales juegos infantiles (que se desplazarían a la zona entre las calles Arana y Monseñor Esténaga y se protegerían bajo pérgolas), la antigua estación de buses tendría un uso múltiple. Por un lado, funcionaría como bicilonja. Y por otro, como centro de distribución de mercancías para dar servicio a toda la zona.