Los hogares unipersonales han superado en número a los denominados hogares nucleares con hijos e hijas por primera vez desde que hay registros en Euskadi. Según la Encuesta de Familias y Hogares de Euskadi (EFH), realizada por el Órgano Estadístico del Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico del Gobierno vasco y presentada por la consejera Nerea Melgosa, en 2023 había 290.497 personas que vivían solas, frente a los 289.361 hogares denominados nucleares, compuestos por hijos e hijas.
Este cambio marca un hito en la configuración de los hogares en la CAV, donde las personas que viven solas ya representan el 13,18% de la población, ocupando casi un tercio del total de los hogares (31%). Mientras tanto, los hogares nucleares, aunque siguen siendo el modelo con mayor número de personas (1.059.900 habitantes, el 48% de la población), han experimentado un descenso significativo en los últimos años.
Un fenómeno en crecimiento
Durante la presentación de la Encuesta, la consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico destacó el aumento de los hogares unipersonales, que han crecido en más de 27.000 desde 2019. "En los últimos cuatro años hemos observado un incremento constante de las personas que viven solas. Este fenómeno refleja cambios profundos en los patrones de convivencia y en la composición de los hogares", señaló.
La consejera también recordó que "desde el siglo pasado, el aislamiento de las familias nucleares ha sido una de las características estructurales más importantes en el análisis de la familia".
Entre las tendencias actuales mencionó el aumento de las separaciones matrimoniales, la reducción del número de hijos por familia, el incremento de los hogares monoparentales y un retraso en las edades de maternidad.
Reducción de hogares nucleares y tamaño medio
En los últimos ocho años, el número de hogares nucleares ha disminuido notablemente, pasando de 308.602 en 2015 a 289.361 en 2023. Este descenso también ha repercutido en el tamaño medio del hogar, que ha menguado de 2,48 personas en 2015 a 2,35 en 2023.
De manera paralela, se han registrado 17.000 nuevas familias monoparentales en los últimos cuatro años. Por el contrario, las uniones tradicionales han disminuido en 40.000 durante el mismo período.
Percepciones y retos de los hogares vascos
La encuesta también aborda las percepciones de los hogares vascos respecto a diversas problemáticas. Un dato destacado es que un 11,7% de las familias considera que tiene menos hijos de los deseados. Las razones principales son causas naturales (5,2%), pero también se mencionan limitaciones económicas, precariedad laboral y dificultades para conciliar vida personal y profesional.
Por otro lado, un 0,2% de los hogares reporta una ausencia total de ingresos, y un 6,3% afirma que sus ingresos son insuficientes para cubrir necesidades básicas como alimentación y vestimenta. Además, un 15,7% subraya la necesidad de realizar arreglos en la vivienda, mientras que solo un 3,2% considera que su hogar está en un estado deficiente.
Impacto de los cuidados y la conciliación
La conciliación laboral y familiar también es un tema clave en el informe. Un total de 69.772 personas han interrumpido su actividad laboral por problemas asociados a la conciliación, siendo el 80% de ellas mujeres. Además, un 6,5% de los hogares vascos percibe una sobrecarga de trabajo debido al cuidado de personas mayores.