Cultura

Los lectores de Ibañez despiden en las redes al mentor de muchas infancias

El dibujante, creador de Mortadelo y Filemón y de muchos otros personajes, ha fallecido a los 87 años
Francisco Ibáñez ha fallecido a los 87 años.

Los lectores del dibujante Francisco Ibáñez, fallecido este sábado, se han volcado en Twitter para mostrar su dolor por la pérdida del que fue mentor de muchas infancias y un gran maestro del cómic, con el que muchos empezaron a disfrutar de la lectura y también del humor a través de sus personajes más universales: "Mortadelo y Filemón".

La red social se ha llenado de mensajes de condolencia y nostalgia de muchos ciudadanos, de al menos tres generaciones, que se iniciaron en la lectura con sus tebeos y en una época -como dice uno de sus seguidores en un tuit- "sin internet, ni tablet, ni consola, sin TikTok y casi sin bici ni balón, en el que el mayor tesoro eran esas páginas de colores".

"¡Qué pena! Descanse en paz. Nunca he visto a nadie reírse con tantas ganas como a mi hijo mayor de niño, cuán largo era tumbado en la alfombra leyendo Mortadelo y Filemón", comenta una madre.

Otro usuario, Manuel, dice que siempre recordará esas visitas hace 40 años a casa de su tío que tenía todos los volúmenes de Mortadelo y Filemón. "Esas tardes leyéndolos uno tras otro en un salón, yo solo y los personajes. Nadie más".

"Debo tantas horas de diversión a F. Ibáñez que no sé qué decir. En mi casa, tres generaciones -mi padre, yo, mis hijos- hemos reído a carcajadas con sus historietas y personajes. Trabajó hasta el final para hacernos a todos un poquito más felices", señala Rafa.

Otro seguidor recuerda uno de los momentos más felices de su infancia, cuando le regalaron dos tomos de SuperHumor con las historias "Mortadelo y Filemón". "Las historias de los dos descacharrantes agentes secretos de la TIA -asegura- fueron de las cosas más bonitas que he tenido en mi infancia".

A otra ciudadana le llamó la atención cuando era niña unas hojas llenas de dibujos y colores: "aquellas historietas graciosas" -mantiene- fueron las primeras líneas que comenzó a leer por el gusto de leer.

Los cómic de Ibañez siguen en casa y en el aula de Juanjo, como un tesoro, "iniciando en la lectura a muchas generaciones".

"Se nos está muriendo nuestra infancia -afirma Anais-. Gracias por enseñarnos el mundo con los ojos del humor y por alegrarnos la niñez de todas las edades", añade.

La mayoría de quienes escriben recordándolo han crecido con la habitación llena de tebeos con sus personajes, y en algunos casos les enseñaron a leer, como a Eduardo que asegura que "Morta y File no se quedan huérfanos, nosotros los acogeremos".

Gracias a Ibañéz y a sus personajes, muchos de los españoles aprendieron a ver el mundo, a ver la vida como una aventura. "A reírnos de nuestros errores, y a comprender los ajenos. Gran persona, gran corazón. Hizo el mundo más amable y más humano con sus lápices y su gran humanidad", escribe Maricruz.

"Me hiciste entender qué era un tebeo -comenta otro-. Me reí a carcajadas con tus ocurrencias, mientras mis padres dudaban si era por un tebeo, un videojuego o porque me estaba volviendo majara. Permanecerás en mi recuerdo siempre".

Algunos creen, como Mariano, que no se ha valorado lo suficiente a Ibáñez por lo que ha hecho por el fomento de la lectura en España y por la felicidad y el humor, y otros se lamentan de que el año pasado y anteriores no le dieran el Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades.

Los lectores de sus cómic están de luto, pero también reconocen que éste es uno de los pocos acontecimientos que puede unir a tantos pensamientos divergentes en Twitter, aunque, como escribe Violeta: "una pena, en cualquier caso" porque "es decir adiós a la infancia de muchos".

16/07/2023