Los ministros de Exteriores de la Unión Europea se reúnen este lunes para tratar la situación en Ucrania y reafirmar el apoyo a Kiev frente a la invasión rusa, pero sin tener todavía cerrado el acuerdo para realizar compras conjuntas de munición, después de que los Estados miembros mantengan diferencias sobre el tipo de material que se considera de producción europea.
La cita en Luxemburgo viene marcada por las quejas de Ucrania que considera "frustrante" la "incapacidad" de la UE para adoptar el plan de compras conjuntas de munición acordado hace un mes por los líderes europeos, tras las discrepancias sobre qué tipo de material debe ser objeto de las adquisiciones mancomunadas.
En Bruselas rebajan las críticas del ministro de Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, que participará por videoconferencia en la reunión y señalan que "no reflejan la realidad del apoyo militar" de la UE a Ucrania. Un alto cargo ha defendido que los Veintisiete ya están movilizando sus arsenales propios para ofrecer munición y misiles a Kiev, y vaticinan un acuerdo pronto para avanzar con las compras conjuntas que en ningún caso incidirán en un gran retraso en el envío a Ucrania.
En una conversación telefónica con Kuleba, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha recalcado este viernes que la UE cumple con sus compromisos y que ya ha movilizado material militar, por los Estados miembros han pedido el 66% de la partida de 1.000 millones prevista para entregar munición de los stocks existentes. "La urgencia es clara y la UE hará todo lo que pueda para entregar de forma rápida", ha insistido.
Las diferencias se han aireado tras la posición enconada de Francia para asegurarse de que los componentes y elementos de los equipos militares que se produzcan de forma mancomunada sean europeos, una visión rígida que reduciría la compra en industrias nacionales cuya cadenas de valor contiene elementos de fuera de la UE y capital extranjero.
"¿Esto va de promover la industria francesa o de impulsar la europea en su conjunto y ayudar a Ucrania?", se preguntan fuentes diplomáticas consultadas por Europa Press, respecto a este debate que amenaza con retrasar la puesta en marcha de pedidos industriales.
El malestar se extiende a otros países del bloque que reclaman un acuerdo lo antes posible y recalcan que el elemento clave del acuerdo es ayudar a Ucrania lo antes posible con munición. "Todo lo demás debe ser secundario", insisten.
En el caso del Estado español, que tiene dos empresas, EXPAL y FMG, identificadas entre las 15 listas para producir munición a través de contratos con la Agencia Europea de la Defensa, fuentes diplomáticas esperan que los criterios del acuerdo final incluyan a las dos compañías.
Otras fuentes indican que el acuerdo esta cerca y quitan hierro a la polémica indicando que todos los Estados miembros están de acuerdo en la "sustancia" del plan de compras conjuntas y en que la prioridad debe ser la munición fabricada en Europa. Ahora queda por ver como se protege la cadena de valor pues muchos materiales provienen de terceros países como Australia o Sudáfrica. "No hay desacuerdo en preservar esto, sino que el reto es como ponerlo en un texto legal", argumentan.