Los Mossos d'Esquadra han evitado que tres hermanas residentes en la provincia de Lleida, dos de ellas menores, fueran víctimas de un matrimonio forzoso y de la mutilación genital femenina, en un caso en el que han interrogado a los padres pero en el que por el momento no hay detenidos.
Según ha avanzado el diario "Segre" y han confirmado a EFE fuentes policiales, en junio pasado los Mossos fueron alertados del riesgo inminente de las tres hermanas ante la posibilidad de que viajaran con su familia a su país de origen, en el Sahel, y que allí se les sometiera a la ablación y que se les obligara a casarse en contra de su voluntad.
Los Mossos, que fueron alertados por el entorno educativo y del ambulatorio de referencia de las tres chicas, residentes en una localidad de la comarca leridana de la Segarra, aplicaron el protocolo previsto para este tipo de casos, en que habitualmente se retiene el pasaporte a las afectadas para impedir que viajen.