El año pasado se registraron en Euskadi 13.647 nacimientos, una cifra muy parecida a la del año anterior (-0,1 %), mientras que hubo 22.167 muertes, lo que supuso un descenso del 8,4%.
Con estas cifras facilitadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) el saldo vegetativo en Euskadi, es decir la diferencia entre nacimientos y defunciones, fue negativo en 8.520 personas.
El año pasado todas las CCAA, excepto Madrid, Murcia e Illes Balears tuvieron saldos vegetativos negativos. El número de nacimientos solo aumentó en Madrid y Extremadura y las defunciones se redujeron en todas las regiones.
En el conjunto del Estado español se contabilizaron el año pasado un total de 322.075 nacimientos, lo que supuso un descenso del 2%, de manera que continúa la tendencia a la baja de la última década, solo interrumpida en 2014. Desde el año 2013, el número de nacimientos ha bajado un 24,1%.
En cuanto a las defunciones en 2023 murieron en el Estado 435.331 personas, un 5,8% menos que en el año anterior. Por edad y sexo, el mayor descenso en las defunciones en términos relativos se observó en las personas entre 85 y 89 años. El saldo vegetativo de la población fue negativo en 113.256 personas.